Tropas del Ejército brasileño enviadas a Río de Janeiro ocuparon ayer diferentes favelas de la ciudad en el marco del plan del gobierno nacional para contener la ola de violencia que afecta la metrópoli, según informaron las autoridades.

Como resultado del megaoperativo, que movilizó a cinco mil efectivos de las distintas fuerzas de seguridad destinadas en Río, de los cuales 3.600 son efectivos del Ejército, dos personas murieron al enfrentarse a efectivos de seguridad, otras 18 fueron arrestadas, se incautaron dos pistolas, una granada y una no especificada cantidad de marihuana y cocaína. En la operación, que tuvo como objetivo el combate al robo de camiones de cargas y el tráfico de drogas, las fuerzas de seguridad ocuparon desde la madrugada tres favelas en la Zonas Norte y Oeste de la ciudad, en la región metropolitana de Río de Janeiro, en un procedimiento que incluyó apoyo aéreo y el corte de calles y avenidas para cerrar la entrada y salida en la región..

El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Torquato Jardim, explicó a la prensa que las acciones en conjunto de las fuerzas nacionales y del Estado carioca ya provocan efectos en el combate al delito. “Ya se producen resultado significativos. El primero, terminar con el mito del crimen organizado poderoso, que no existe acción legal que lo detenga”, destaco Jardim. “Vamos permanecer en la zona hasta que se cumplan los objetivos. Pueden ser 24 horas, el fin de semana, tres días o 15 días. El objetivo es bloquear el crimen organizado”, dijo, por su parte, el ministro de Defensa, Raul Jungmann, a TV Globo. “El crimen en Río de Janeiro tiene que sentir que ya no tiene la seguridad con la que contaba anteriormente”, advirtió.

Según las autoridades, esta megaoperación, denominada Onerat, es la segunda etapa de las acciones de seguridad para combatir la ola de violencia que afecta a Río de Janeiro.