Este cuatrimestre egresará la primera camada de Técnicos en Artes Escénicas de la Universidad Nacional de La Matanza. Esta carrera, creada en plena pandemia de COVID, fue una de las primeras dedicadas a la actuación de la Provincia de Buenos Aires constituyendo un antecedente en la educación artística bonaerense. Dos años y medio después, tiene cupos completos y uno de los niveles más bajos de deserción de toda la universidad de La Matanza.

La Tecnicatura en Artes Escénicas fue creada en 2021 por la Universidad Nacional de La Matanza como parte de un programa que buscaba incorporar artes al programa educativo universitario. Para esto, crearon una serie de tecnicaturas aranceladas de dos años y medio de duración entre la que se encuentra la dirigida por el actor y profesor de teatro Gabo Correa. “En 2020 estaba como todos los actores, sin trabajo e intentando pensar mi futuro sin el aspecto fundamental de la labor actoral que es la presencialidad. Entre esas búsquedas, había presentado a la universidad de La Matanza un proyecto de seminario breve de actuación. Al tiempo, me llamó alguien de la universidad para tener una reunión en la que me ofrecieron la coordinación de una nueva Tecnicatura de Artes Escénicas ya aprobada por el Ministerio de Educación. Esta constaba de materias cuatrimestrales y duraba 2 años y medio. Para mí fue una sorpresa enorme y acepté inmediatamente. Así me metí en un lío hermoso que fue dirigir una carrera de actuación en condiciones de total virtualidad.” explicó Gabo Correa.

Esta primera camada de estudiantes, que en 2021 inició su experiencia universitaria de formación escénica desde sus habitaciones y a través de cámaras, se recibirá a mitad de año como los primeros Técnicos en Artes Escénicas de la Provincia de Buenos Aires. Su proyecto final será una varieté “al estilo Parakultural” que el director de la tecnicatura espera apoyar institucionalmente para que encuentre un espacio de difusión extrauniversitario en el Municipio de La Matanza. De ese modo, se cerrará correctamente un ciclo programado que tiene como foco principal la formación artística de los bonaerenses, pero que también piensa en su salida laboral y en la formación de un circuito cultural alternativo de artes escénicas en la Provincia de Buenos Aires.

“Más allá del programa, que desde su diseño incluye una materia dedicada a pensar su inserción laboral, la tecnicatura en general tiene un enfoque muy ligado a la posibilidad de una salida laboral. Hoy los pibes y las pibas buscan rápidamente la utilidad de su formación y nuestro enfoque busca ayudarlos. Abiertamente el equipo docente piensa en eso: estar al servicio de su proyecto de vida y ofrecerles ayuda. De ahí la idea de que su proyecto final sea un primer pie laboral dentro del Municipio en el que también viven.” afirmó el director.

Esta atención en la salida laboral de los estudiantes es uno de los aspectos fundamentales, pero no el único, que la constituyó como la Tecnicatura con más bajo nivel de deserción de la Universidad Nacional de La Matanza. Gabo Correa explicó para este medio que “no sólo se trata de contener en términos laborales a los estudiantes, sino también aceptar que el trabajo escénico sucede con el cuerpo y con la presencia, que eso implica abrir un campo emocional que no siempre está abierto antes de iniciarse en la vida universidad y que eso hay que cuidarlo generando espacios de diálogo que lo encaucen. Cuidar lo emocional y lo afectivo, reconocerlo como un material imprescindible para la creación, es necesario en nuestro espacio educativo“.

Este año la Tecnicatura abrió sus puertas a su tercera camada de estudiantes universitarios. Una camada muy distinta a aquellos que iniciaron virtualmente en plena pandemia, pero con el mismo entusiasmo que implica poder estudiar artes escénicas sin necesidad de recurrir obligatoriamente a la Capital de Buenos Aires . Tres años después de su creación, la carrera tiene una excelente convocatoria y su director espera no sólo seguir recibiendo aquellos bonaerenses que ya buscaban un espacio de formación sin encontrarlo, sino también a los que no pensaban siquiera en las Artes Escénicas pero, que al ver el nombre en una grilla universitaria, pensaron por primera vez en la actuación.