Los trabajadores autoconvocados de la Salud continuarán de paro hasta el viernes, enmarcándose la medida de hoy en un paro nacional convocado por la CTA. Para mañana, en tanto, se prevé una movilización en plaza 9 de Julio desde las 19. Hasta ahora no tienen diálogo con el gobierno provincial.

En cambio, lo que sí se conoció, es que hubo pedidos para que se identifique a quienes se encuentran adheridos a las protestas.

En una notificación que llegó el martes pasado a algunas áreas operativas, se solicita a las y los encargados de los centros sanitarios “informar en carácter de pronto despacho la nómina del personal que se encuentra adherido a las asambleas en los turnos mañana y tarde o cualquier otra novedad a la interrupción, no prestación de servicios del personal a su cargo. Asimismo y por indicación del ministro de Salud, les recuerdo que deberán remitirse periódicamente las novedades de incumplimiento a la jornada laboral (turno matutino, vespertino y nocturno), de todo el personal a cargo. Se solicita se sirvan de dar conocimiento del presente informe, a los jefes de los centros de Salud a su cargo”.

Esta fue la única respuesta que obtuvieron hasta ahora los trabajadores y trabajadoras de la salud que vienen realizando medidas de fuerza. La falta de novedades del gobierno contrasta con la conferencia de prensa que realizó ayer para dar a conocer novedades para la docencia, que también está inmersa en un conflicto laboral. Sin embargo,  en ninguno de los casos se convocó a una reunión con referentes autoconvocados.

“A la gente le dijeron que si hay faltas injustificadas éstas pueden ser causal de despido”, contó ayer a Salta/12 Eliana Castro, una de las tres agentes de Salud que se encuentran en huelga de hambre desde hace seis días. Desde el martes último las acompaña una docente que se sumó a la medida que se lleva adelante en una carpa ubicada en la central plaza 9 de Julio.

Castro contó que tanto sus compañeras como algunas docentes ayer intentaron acercarse al gobernador Gustavo Sáenz mientras se desarrollaban los actos oficiales en el marco de la conmemoración de un nuevo año de la muerte de Martín Miguel de Güemes, sin resultado positivo. 

Después de una semana sin aparición pública, el gobernador solo respondió que hablará con los gremios cuando lo consultaron sobre los conflictos en la provincia. La cuestión es que los gremios no lograron contener a las trabajadoras y trabajadores autoconvocados que entienden que el resultado de las negociaciones paritarias es insuficiente. Como ejemplo, Castro indicó que en Salud hay personas contratadas por $60 mil por mes. Es el caso de una mujer con ocho hijos a cargo, quien se manifestó preocupada porque no podrá ayudar a su hija mayor a continuar estudios superiores.

“Estamos llamando a un salteñazo”, dijo esta trabajadora, quien destacó que parte de la población apoya a quienes se manifiestan. Advirtió que, de hecho, no solo se trata de Salud y Educación, sino que también hay conflictos entre las y los trabajadores municipales y judiciales, que también llevan a cabo medidas de fuerza en estos días.

El reclamo del sector sanitario es por el reconocimiento de un mayor porcentaje por antigüedad, la no discriminación entre médicos y no médicos para el pago de algunos ítems, la estabilidad laboral de agentes que aún se encuentran con contratos, y el 82% móvil.