La jusiticia penal dictó el procesamiento de un asesor impositivo y del funcionario de una entidad bancaria detenidos el lunes 10 de julio, en el marco de los 23 allanamientos realizados ese día a partir de una denuncia de la Aduana por simulación de importaciones con el fin de obtener los dólares al precio oficial y girarlos al exterior.

La operación, conocida en la jerga como "rulo financiero", consiste en obtener la autorización de compra de dólares al Banco Central a valor oficial, a partir de documentación apócrifa simulando una compra al exterior. Los dólares así obtenidos se giran al exterior, a mitad del valor que costaría obtenerlos en el mercado bursátil o las "cuevas" de la city, lo cual supone una ganancia del 100 por ciento para el evasor.  

La Dirección General de Aduanas había detectado diversas maniobras de este tipo a través del seguimiento realizado por agentes especializados y las denunció penalmente, dando lugar a que la justicia ordenara los mencionados allanamientos (en Mar del Plata, CABA y Gran Buenos Aires) y detuviera a dos personas involucradas.

Tras los allanamientos, la Justicia en lo Penal Económico dictó el procesamiento de Héctor Pablo Hermosilla –asesor impositivo de Mar del Plata- y Mariano Mandaradoni –"empleado infiel" de una entidad financiera-, ambos detenidos el pasado lunes 10 de julio. 

Intervino el Juzgado en lo Penal Económico N°9, a cargo del Dr. Javier López Biscayart con la Secretaría a cargo de María Luján Braccia. Actuó en el expediente el Juez subrogante Marcelo Aguinsky. 

La causa se originó en una denuncia de la Aduana efectuada en marzo de este año, en razón de haber detectado que cinco empresas inscriptas como importadoras y exportadoras, Minerbit SA, Komerco Black SA , Mirras SRL, Amareto SRL y Global Edition SRL, habían efectuado, a través de las entidades bancarias donde tenían radicadas sus cuentas, mediante la utilización de declaraciones tipo SIMI, la simulación de importaciones por más de cinco millones de dólares estadounidenses en total, con el objetivo de justificar su giro al exterior.

Los imputados, que se negaron a declarar, se desempeñaban respectivamente como contador en la Ciudad de Mar del Plata asesorando en comercio exterior a terceros,y el restante como empleado en relación de dependencia en el sector de Comercio Exterior de una entidad financiera, ante el cual se habrían realizado algunas de las transferencias internacionales. 

El procesamiento fue dictado por el delito de contrabando agravado en concurso con el de falsedad documental, en ambos casos en calidad de autores y se decretaron embargos por $ 1.550 millones. 

A través de la amplia actividad probatoria realizada en la causa se pudo establecer la relación de ambos procesados con algunas de las empresas denunciadas, con entidades bancarias utilizadas en la operatoria, como así también su posible participación en el armado del entramado societario falaz para efectuar los giros ilegales y evitar con ello la trazabilidad de la maniobra hasta sus verdaderos responsables. 

Cuatro de las empresas involucradas resultarían sociedades apócrifas que se utilizaron exclusivamente para abrir cuentas bancarias y aparentar falsas operaciones de importación, posibilitando la obtención de divisas al cambio oficial y su giro al exterior. Las mismas carecían de capacidad económica, eran integradas por personas vulnerables y en algunos casos también se ha logrado detectar que coincidiría el beneficiario del exterior. 

Si bien este procesamiento surge del desarrollo de las primeras líneas de investigación, se trata de una estructura compleja para cuyo análisis global resta todavía analizar los elementos secuestrados en los allanamientos y el producto de prueba internacional pendiente de producir, informaron fuentes de la Aduana.