El cantante murió a los 96 años en su Nueva York natal
Adiós a Tony Bennett, el último crooner
Con su fallecimiento se da vuelta una página en la historia de la música y del entretenimiento, ya que era uno de los máximos exponentes de esa suave raza de cantantes que en complicidad con el micrófono cautivó multitudes cantando bajito. Durante sus más de 70 años de carrera grabó un centenar de discos y recibió numerosos premios.
