Una camioneta de Gendarmería Nacional atropelló a seis personas, dos de ellas menores de edad, en medio de una persecución por las calles del partido de San Miguel. El vehículo oficial cruzó un semáforo en rojo y embistió a un auto que cruzaba la avenida Balbín; por el impacto, la camioneta subió a la vereda y atropelló a un matrimonio y sus dos hijos, de tres y cinco años, respectivamente. Un vocero de Gendarmería informó que que el móvil de ese organismo se encontraba en medio de una persecución y que llevaba encendida la sirena, aunque los testigos del choque desmintieron esa versión.

El miércoles por la noche, una camioneta de Gendarmería con cuatro agentes circulaba a toda velocidad por la avenida Balbín, que cruza todo el partido del oeste bonaerense. De acuerdo con una fuente de esa fuerza de seguridad, el móvil se encontraba “en medio de una persecución a delincuentes” (aunque no aclaró qué delitos habrían cometido) pero testigos de lo sucedido aseguraron que, en lugar de llevar encendida la sirena reglamentaria para alertar a los demás conductores de la situación, la camioneta se limitaba a hacer sonar la bocina. En el cruce de otra avenida importante de San Miguel, Remigio López, el semáforo de Balbín se puso en rojo. De todos modos, la patrulla aceleró y siguió su camino.

En ese mismo momento, por la otra mano, una mujer que conducía un Chevrolet Agile dobló en la esquina para seguir camino por la otra avenida. “La verdad no escuché la sirena ni nada, solo fue el impacto del choque y mi auto hizo un trompo que terminamos cruzados en la avenida. La camioneta venía muy fuerte y cruzaron en rojo, yo doblé bien, con semáforo en verde. Mi primo que venía conmigo salió volando del auto por la frenada”, explicó la conductora luego del choque y la seguidilla de atropellos.

Por el impacto contra el Chevrolet, la camioneta salió despedida y no pudo frenar; subió a la vereda y atropelló a una familia que caminaba por allí. Luego, el vehículo siguió unos metros más y terminó chocando contra un poste de luz, que finalmente detuvo su carrera.

“Cuando vimos al móvil de Gendarmería tocando bocina e ir un poco rápido, nos quedamos parados en la esquina. Lo último que recuerdo es el choque y ver que la camioneta venía hacia el lado que estábamos nosotros”, dijo por su parte Sergio, el hombre que regresaba a su casa junto a su esposa y sus dos hijos.

Las seis personas chocadas por el patrullero fueron trasladas hasta el Hospital San Miguel. Tanto la chica de cinco años como su madre, que esperaban para cruzar la avenida terminaron con las piernas fracturadas y golpes en la cabeza, por lo que anoche aguardaban los resultados de los estudios. Por otro lado, tras salir del centro médico, la mujer que conducía el Chevrolet denunció en sede policial la maniobra de los gendarmes.

Por su parte, los cuatro gendarmes que iban en la patrulla sufrieron heridas leves y fueron asistidos en el hospital militar de Campo de Mayo, ubicado a unos pocos kilómetros del lugar del choque. Este diario se comunicó con Gendarmería Nacional para saber qué operativo llevaban adelante los gendarmes, pero no obtuvo respuesta.