Al cumplirse 50 años de la publicación de la primera novela de Osvaldo Soriano, "Triste, solitario y final", se realizarán en la Biblioteca Nacional Mariano Moreno actividades que recuerdan la literatura del marplatense que conmovió a los lectores con sus ficciones, además de con sus notas periodísticas. Desde el primer número del icónico Página/12 en 1987 hasta su muerte en 1997, supo escribir en las célebres contratapas de nuestro diario, donde reflexionaba agudamente sobre la realidad nacional y las maneras de ser de las y los argentinos.

Una charla acerca del impacto del policial negro en su literatura se realizará este viernes 25 de agosto, en la Biblioteca Nacional, con la participación de Juan Sasturain, director de la biblioteca, acompañado de María Inés Krimer, Ezequiel De Rosso y Nicolás Ferraro.

La charla se inscribe en el marco de la muestra "50 años de Triste, solitario y final", la exposición que presenta la Biblioteca en homenaje a Soriano y a su primera novela. La muestra retoma aspectos vinculados a esa trama a través del acervo de la institución: artículos de Soriano en La Opinión y Satiricón sobre el Gordo y el Flaco, Raymond Chandler y su detective Philip Marlowe, la historieta de Sanyú publicada en SuperHumor, la primera edición de la novela en Corregidor y la edición francesa con prólogo de Julio Cortázar, entre otros materiales. 

Soriano fue un lector apasionado de Dashiell Hammett y, principalmente, de Raymond Chandler. Según contaba el propio escritor argentino, su gato negro, que se llamaba Marlowe como el detective de Chandler, fue inspiración determinante para construir su primer libro. Tanto el título como el epígrafe inicial son parte de "El largo adiós", la novela más famosa de Chandler y una de las preferidas de Soriano.

Además, el género negro le sirvió al autor para publicar su primer texto pero también para tratar temas cruciales de la historia argentina como la lucha armada, el peronismo, el exilio y la última dictadura militar.

Publicada en 1973, aquella primera obra también es una novela llena de gags al cine, en homenaje a las películas de Stan Laurel y Oliver Hardy, recordados como el "El gordo y el flaco", como recuerda el curador de la exposición ubicada en el tercer piso del edificio de la biblioteca, Tomás Schuliaquer. "Triste, solitario y final es una novela muy peculiar, que fue muy exitosa desde su publicación en cuanto a venta y circulación, pero al mismo timpo muy disruptiva, porque tiene como personajes principales al propio Soriano y a consumos culturales de los cuales el escritor era muy fanático pero que eran contradictorios entre sí: el Gordo y el Flaco, Raymond Chandler y su detective Philip Marlowe, uno de sus escritores preferidos". 

Las razones para recuperar ese primer libro a cincuenta años de su publicación, son variadas. En palabras de Juan Sasturain, director de la Biblioteca Nacional, se trata de "una forma de homenajear a quien fuera uno de los escritores argentinos más populares en los 80 y los 90, pero sobre todo, una propuesta: la de volver a leer sus textos".

En relación a la publicación del libro, a Sasturain le es imposible no referirse a la estrecha relación personal que mantenían con el escritor y periodista: “Para el 73, Osvaldo terminó su primera novela y –como a varios de por ahí– me dio a leer el original. Le dejé mi opinión favorable con leves reparos, café mediante, en una mesa de La Giralda; ese día me contó la idea de tapa con el Gordo y el Flaco en la cornisa y la ciudad a sus pies, como sería. Por entonces, los raros cultores del género negro confluíamos en Corregidor, la editorial del gallego Pampín. Y ahí salió la hermosa Triste, solitario y final”.

Además de la charla "La influencia del policial negro en la literatura de Soriano", durante agosto y septiembre se desarrollarán varias actividades en la Biblioteca Nacional que honran esa primera novela del clásico escritor, entre las que se incluye una actividad que relaciona su literatura con el fútbol, otra de sus pasiones.

La charla tendrá lugar a las 19, en la Sala Augusto Raúl Cortazar de la Biblioteca Nacional. En tanto, la muestra "50 años de Triste, solitario y final" se puede visitar hasta el 1 de octubre en el hall del tercer piso de la institución, de lunes a viernes de 9 a 21, y sábados y domingos de 12 a 19.