Ayer al caer la tarde, en la capital salteña, centenares de personas se manifestaron en contra del dictado de clases obligatorias de religión en las escuelas públicas. La manifestación, que se realizó en la semana de pausa de las audiencias que ventila una causa judicial al respecto ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación (el proceso de exposición de amicus curiae continuará el miércoles próximo, y el jueves expondrán las partes de la causa), comenzó a las 18, en la Plazoleta IV Siglos. El encuentro tuvo la consigna “Pública y laica, vengo a gritar, la religión que se quede en la Catedral”, y reunió a representantes de organizaciones sociales, partidos políticos, grupos de padres y madres y autoconvocados independientes que respaldan el pedido judicial para que las escuelas públicas provinciales no incluyan en la currícula las clases y prácticas de educación religiosa, algo que sucede desde 2008, cuando fue dictada la ley provincial de educación. La manifestación recorrió el entorno de la plaza principal de la ciudad y pasó por delante de la Catedral, que estuvo fuertemente custodiada por policías.