A pesar de la tormenta, bajo la consigna “La marcha lenta de la Justicia”, miles de personas se manifestaron ayer en la ciudad de La Plata para reclamar que “se intensifique la búsqueda” de Johana Ramallo, de cuya desaparición se cumple hoy un mes. La marcha, organizada por familiares y amigos de la joven de 23 años, comenzó con una concentración frente al edificio de las fiscalías, en avenida 7 entre 56 y 57, para luego marchar hacia la gobernación bonaerense. El martes pasado, los familiares y amigos de Johana tomaron por unas horas las oficinas del Consejo Provincial de las Mujeres, dependiente de la Subsecretaría de Género y Diversidad de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, para demandar la intervención activa del Estado en la resolución del caso y para solicitar una entrevista urgente con la gobernadora María Eugenia Vidal.

Los organizadores del acto afirmaron en un documento que “hoy Johana, al igual que Santiago Maldonado, se encuentra desaparecida. Si bien los motivos y las circunstancias de su desaparición son diferentes, tanto Santiago, como Johana y miles de otras mujeres se encuentran desaparecidxs en democracia”. Recordaron, en ese sentido, que “un informe de la Protex (la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas) señala que al año 2013 había ya 3231 mujeres desaparecidas”. Por tales razones, exigieron: “Basta de mujeres desaparecidas en democracia (...) y basta de desaparecidos: aparición urgente de Santiago Maldonado”.

Johana Ramallo fue vista por última vez, por una amiga, el 26 de julio en una estación de servicio ubicada en 1 y 63. Su presencia en el lugar fue confirmada por las cámaras de seguridad del lugar y por las que están instaladas a unos mil metros de allí. Desde entonces no se sabe nada sobre su paradero. La madre de la joven, Marta Ramallo, le dijo a PáginaI12, a dos semanas de la desaparición, que la familia “está en desacuerdo con la forma en que se está investigando” el caso, caratulado por la fiscal Bettina Lacki como “averiguación de paradero”, mientras la querella viene reclamando que se califique como “desaparición forzada de persona”.

Agustina, integrante del grupo que viene acompañando a la familia, dijo ayer en la marcha que “a un mes de la desaparición de Johana se está actuando un poco lento porque si bien hubo rastrillajes y operativos, un mes es mucho tiempo para que Johana permanezca sin volver a su casa”.

Recordó luego que todavía no han tenido una respuesta positiva respecto del reclamo para que se cambie la carátula del caso porque “no se puede seguir pensando que Johana se fue por su propia decisión”. 

En el comunicado, el grupo que acompaña a la familia resaltó que quieren ver “avances concretos en su búsqueda (porque) no podemos aguantar más los tiempos lentos de la justicia”. Precisaron que “la investigación tiene una cantidad enorme de datos para poder profundizar esta búsqueda”. Esto es así porque “se tomaron declaraciones, se hicieron allanamientos”, pero “a medida que pasa el tiempo, se abren más preguntas que respuestas, cuando lo único que necesitamos es la respuesta a una pregunta muy simple: “¿Dónde está Johana?” 

El punto crucial, de acuerdo con la opinión de la familia, es que “sea la fiscalía la que marque la estrategia de la investigación y tome las declaraciones, y no la policía”. Además, demandaron “un acceso más rápido a la causa, ya que nos encontramos con retrasos en la información que se nos brinda”. En este punto, señalaron que “la familia de Johana, siendo particular damnificada, debería ser la primera en enterarse de las novedades”. Esto no ocurre así porque se ha “llegado al colmo de enterarnos de la realización de un operativo por los medios de comunicación, antes que por la justicia”. Por estos motivos marcharon ayer para decir: “Basta de retrasos en la investigación y en el acceso a la causa”.