Cristina Fernández de Kirchner se hizo presente hoy en la embajada de Cuba en la Argentina, donde se reunió con el embajador Orestes Pérez Pérez y presentó sus condolencias por el fallecimiento de Fidel Castro el viernes pasado.

La ex jefa de Estado arribó este mediodía a la representación cubana, en Virrey del Pino 1810, en el barrio de Belgrano. En la embajada hay un libro de condolencias abierto al público hasta el viernes 2 de diciembre.

“Fidel fue el último líder moderno; solamente los necios pueden discutirlo o negarlo”, afirmó Cristina a los periodistas al salir de la embajada. “Cuando se va un grande, no hay que estar triste, sino al contrario, y más cuando ha vivido como lo he hecho él, atento a lo que pasaba en su país y en el mundo”, agregó.

Contó que en su diálogo con el embajador “estuvimos recordando los momentos que compartimos en la isla y todo lo que se ha logrado en este tiempo de apertura”. Aseguró que vio a Pérez Pérez “muy optimista y muy seguro después de las cosas que ha vivido Cuba”.

“Cuba ha vivido uno de los procesos más revolucionarios y transformadores del siglo 20”, resumió Cristina al retirarse de la embajada.