En la novena y última jornada "Derecho al Futuro", la ministra de Ambiente de la Provincia, Daniela Vilar, volvió a abordar el tópico del ambientalismo popular que desde hace tiempo ya se convirtió en el eje transversal para las políticas de la cartera que conduce desde el año 2021.  

En el encuentro que se desarrolló este lunes en el auditorio Diego Armando Maradona de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de la Plata; luego de que el ministro de Hacienda y Finanzas, Pablo López hiciera un repaso general de la situación económica de la provincia de Buenos Aires en el primer panel "Desarrollo Económico", llegó el turno de la exposición del "Desarrollo Sustentable". Allí, Vilar estuvo secundada por el presidente del Directorio de YPF-Tecnología (Y-TEC), Roberto Salvarezza, y el presidente de la empresa de servicios ambientales Eittor de Zárate, Agustín Patricio.

La ministra Vilar es uno de los cuadros políticos más importantes entre los surgidos del oficialismo de Lomas de Zamora durante la última década. Esa capacidad de trabajo conjunto fue reconocido cuando, por decisión expresa del gobernador Axel Kicillof, en 2021 nació el Ministerio de Ambiente y Vilar fue la elegida para comandarlo. Vale recordar que la Provincia de Buenos Aires nunca había tenido una cartera así. 

Al tomar la palabra, Vilar utilizó el nombre del panel y trazó un eje que se mantuvo a lo largo de su exposición: "El desarrollo es sustentable o no es". Luego de hacer hincapié en que la creación de la cartera se dio bajo el contexto de la crisis climática, la ministra subrayó que "aunque los serviles negacionistas digan que es una lucha que tiene que ver con el socialismo y se opongan a la ciencia", existe una emergencia global que "profundiza las inequidades y la desigualdad", y que genera que "la gente que la pasa mal, la pase peor". Fue el primer palo a Javier Milei de la jornada. 

A lo largo de estos dos años, el Ministerio de Ambiente se inscribe en el ambientalismo popular. Vilar lo catalogó como "un paragüas filosófico que tiene distintas miradas". Cuando explica, arranca señalando que "la principal problemática ambiental" que existe en el planeta, y la primera a abordar, es "la desigualdad y la pobreza". 

De allí se desprende la necesidad de que las soluciones ambientales se den "con la gente adentro". "Sino, es jardinería", bromeó la ministra, que al instante retomó la profundidad: "Valoramos las militancias conservacionistas que se interesan en las especies y los determinados lugares, pero ellos te ponen la foto de un oso en un pedazo de hielo, y nosotros encontramos que tenemos problemas ambientales mucho más grandes y más cerca".

En cuanto a los problemas más grandes y más cercanos que plantea Vilar, se encuentra la existencia de plomo en la sangre en los menores de edad que habitan la provincia, lo que causa deterioros en términos cognitivos. Dado que hasta 2021, 81 de los 135 municipios finalizaban sus residuos en basurales a cielo abierto, miles de niños hijos de cartoneros y cartoneras acarrean esta problemática ya que sus padres, en busca de rescatar alguna fracción reciclable de los materiales, introducen el plomo involuntariamente en sus organismos. 

Y Vilar lo ligó con la temática del día: "La consecuencia está en el desarrollo". "Eso es marginalidad y ausencia de educación, es una crisis social gravísima, y lo mismo ocurre con el acceso a la alimentación sana, segura y soberana", dijo y agregó que parece "inverosímil que en un país productor de comidas del mundo haya niñeces que no accedan a ellas".

La perspectiva soberana

Luego de señalar que "el ambientalismo popular es una discusión económica", y que "este paradigma se aborda desde una perspectiva soberana", la ministra Vilar indicó que existe "una falsa dicotomía entre producción y ambiente". Entonces explica: "Hay un ambientalismo  que plantea que se trata 'de una cosa u otra', pero nosotros creemos que hay producción sustentable o no hay nada. Lo hacemos para incrementar los insumos del país y generar trabajo". En esa línea, la lomense viajó al recientemente y citó el reclamo de GreenPeace en Mar del Plata, cuando se conoció que comenzaría la explotación petrolera mar adentro.

"Montenegro se embarraba en la playa porque decía que la iban a inundar de petróleo, pero lo que la vamos a llenar es de trabajo. Porque hay un Ministerio que controlará y tenemos un gobernador humano que sabe como abordar la situación". Y sentenció: "La discusión que estamos dando es trascendental. Perón, en 1972, planteó la discusión en la carta a pueblos y gobiernos del mundo. Néstor, en 2004, dijo que nosotros somos acreedores ambientales del mundo, y que este construyó su buen vivir a costa de la explotación. Nosotros, por pedido de Kicillof, promovemos un desarrollo sustentable y con inclusión social".

El científico Roberto Salvarezza, Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de La Plata y presidente de YPF Tecnología (Y-TEC), fue otro de los disertantes en la jornada del lunes. Salvarezza, ex ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación entre 2019 y 2021, comenzó su exposición e hizo una referencia central: "No podríamos pensar en la soberanía energética si Cristina no hubiera recuperado YPF en 2012". Salvarezza indicó que la actual vicepresidenta "tuvo visión estratégica que hoy provee petróleo para exportar y gas para la matriz energética, que es el mayor insumo de la industria".

Y-TEC, la compañía de innovación tecnológica y desarrollo para la producción de la energía, fue creada entre YPF y CONICET en 2012, por decisión de la entonces presidenta Cristina Kirchner. La sede de Y-TEC está ubicada en el municipio bonaerense de Berisso y es un bastión de la innovación, el desarrollo y la investigación aplicada, lo que la posiciona como el centro tecnológico de vanguardia más grande del país.

Salvarezza indicó que, cuando se habla de energía renovables, surge el paradigma del almacenamiento de esa energía, pero que allí apareció el litio, "algo que parecía imposible", según el presidente de Y-TEC, ya que "los funcionarios decían que acá no se podían hacer las baterías porque no teníamos capacidad". "Cuando hablamos de producción hablamos de cuidado ambiental, con facetas sociales, económicas y culturales que están puestas en juego. Miramos el presente, pero miramos el futuro y el agregado de valor", aseguró Salvarezza, que a su vez indicó que "nadie puede desarrollar un proyecto sin tener en cuenta la gente que vive allí". "Sin licencia social no se puede". En esa construcción que mencionó el ex ministro de Ciencia, que busca producir "un ambientalismo de nuestra realidad", se encuentran todos los actores que componen la vida social.

Finalizó Salvarezza: "Hay que pensar en los chicos de Argentina que viven en un ambiente contaminado, por eso debemos construirlo con nuestra mirada, no con la del norte. Hay gente que niega el valor de la palabra derecho, y la ligan a un gasto. El desarrollo sustentable implica hablar de un Estado comprometido. Dicen que hay que achicarlo, pero ese es el desafío: explicar que sin Estado no se puede tener un medioambiente que sea para todos". Otro palo a Milei. 

Daniela Vilar, ministra de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires.


Segunda vida útil

El tercer expositor del panel "Desarrollo Sustentable" fue Agustín Patricio, el responsable general de la firma Eittor, una empresa creada por sus abuelos en 1998 y que está abocada a la revalorización de los residuos industriales. Ubicada en el Parque industrial de Zarate, la planta recibe gran cantidad de residuos en estado líquido y sólido. Según qué residuo sea, en Eittor aplican una tecnología particular, que siempre está atravesada por la premisa de que "el residuo no muera ahí". Según explicó Patricio, en la planta "buscan recuperar la mayor cantidad de elementos y brindarles una segunda vida útil". Plásticos, cartones, vidrios y metales, son procesados junto a cooperativas y ONG's que se especializan en darle una nueva vida útil, para que este salga nuevamente al mercado.

Dado que en la planta de Zárate tratan residuos contaminados por derivados del petróleo, en Eittor le aplican un tratamiento fisicoquímico, mediante el cual le separan la humedad para lograr un producto pesado. Debido a que la mayor cantidad de residuos proviene de la industria alimenticia, hasta hace poco tiempo, solo se utilizaba el compostaje. 

A principios de este año, en Eittor inauguraron una sección donde procesan a los residuos en biodigestores, que son tres tanques de cuatro mil metros cúbicos cada uno, de ocho metros de alto y veintiséis de diámetro, donde se degrada el residuo a través de biogas, sin presencia de oxígeno, lo que genera que se mantenga el metano. "El metano es inyectado a un grupo electrógeno que genera 1.5 megawatts hora, que lo vuelcan a la red eléctrica y le suministra energía a 3500 casas promedio", detalló Patricio en medio de una ovación.

"La empresa que transporta energía en el municipio dijo que equivale al 10 por ciento de la energía de Zárate, y nos genera felicidad porque es energía renovable y que viene de residuos". En su exposición, Patricio subrayó que en cinco años quieren hacer dos plantas más de la misma envergadura, lo que permitirá que "en corto o mediano plazo los vecinos de Zárate tengan un 30 por ciento de consumo de energía renovable". Estos tratamientos tienen, como denominador común, el hecho de cambiar el signo del residuo y generar que no contaminen. Lo meten de nuevo en el mercado y lo transforman en consumo para las personas.

Pese a ello, Patricio destacó: "Puertas adentro y puertas afuera entendemos que no hay mejor tratamiento de un residuo que aquel que no se genera. A cada miembro de Eittor le remarcamos que no hay que decir 'la culpa la tiene el otro', ya que hay muchas prácticas que uno puede abortar por su propia cuenta, como no pedir más bolsas, no consumir plástico de un solo uso, cuidar el agua potable y la energía eléctrica". "El planeta es uno solo y es compromiso nuestro cuidarlo", sentenció.