• (5) Romero: En el primer tiempo vivió una noche demasiado tranquila. Se limitó a devolver las pelotas que sus compañeros le alcanzaban. Con Argentina más adelantada y arriesgando en busca del triunfo todo cambió. No pudo hacer nada en el 1-0, pero en lo que siguió se mostró rápido y atento para cortar los pelotazos con los que la Vinotinto intentaba sorprender a la última línea del equipo de Sampaoli.
  • (4) Mascherano: Raro verlo en la posición de stopper por derecha. De todos modos se notaba que debía contenerse para que ímpetu natural no lo proyectara más arriba. A veces arriesgó demás con la pelota, aunque justo es reconocerle que también supo jugarla, tanto que de sus pies salió el pase profundo habilitando a Dybala que no pudo definir. En el complemento, a sus espaldas los venezolanos encontraron los huecos para los contragolpes.
  • (5) Fazio: Tuvo un primer tiempo sin muchas exigencias, limitado a cubrir las espaldas de Pizarro y de Mascherano. En el complemento, con el equipo más adelantado, aparecieron los problemas que le trae su altura, que lo hace demasiado lento para cortar los contragolpes veloces. Impasable de arriba, ese juego aéreo le da la razón al DT para evitar complicaciones con las pelotas llovidas. 
  • (6) Otamendi: Adaptado a jugar por izquierda, como lo hace en el Manchester City de Guardiola. Se nota que le cuesta cuando lo llevan a la raya. Pero es impasable si lo encaran para adentro. Con stoppers como él y Mascherano, Argentina resigna la sorpresa que podría encontrar con laterales que aporten más en ataque, léase Bustos de Independiente.
  • (6) Pizarro: Un referente en el círculo central. Firme en la marca, prolijo con la pelota, criterioso en sus movimientos. Le faltó, por indicación del DT o por decisión propia, llevar la presión un poco más cerca del área venezolana. Su déficit de anoche fue su escaso aporte en la ofensiva, y es una lástima porque cuando se arrima al área muestra lucidez. 
  • (5) Banega: En los papeles, Sampaoli le encarga hacer prolijos los intentos de ataque argentinos, pero en la práctica todo lo hace a una velocidad tan lenta que facilita la marca contraria. Tuvo un primer tiempo muy prolijo con la pelota, pero en el complemento lució cansado y ya ni siquiera aportó el pase claro. Además, perdió la pelota que posibilitó el contraataque para el 1-0 venezolano. Era el candidato a salir para que ingresara Pastore.
  • (5) Acosta: Arrancó bien, desequilibrando en ataque y siendo un auxilio de Mascherano en el sector defensivo. Complicó cada vez que encaró a su marcador, aunque en el complemento pareció sentir cansancio. No probó rotar y buscar la sorpresa por la izquierda, como lo hace en Lanús. 
  • (-) Di María: Estuvo menos de 25 minutos en la cancha. Mientras jugó, tal vez porque no estaba entero físicamente, trató de no atolondrarse con la pelota, de encontrar mejores decisiones. Con eso le alcanzó para mostrar una mejor imagen que la que había entregado contra Uruguay. 
  • (7) Messi: Como todo el equipo, fue de mayor a menor. Fue como siempre el centro de todas las precauciones venezolanas. A esta altura nadie ignora que si lo anulan Argentina no halla los caminos. Anoche Venezuela eligió rodearlo y a medida que pasaban los minutos pudo controlarlo. Lio rompió ese cerrojo cuando dejó de intentar entrar por el centro y se tiró sobre la derecha. 
  • (5) Dybala: El socio de Messi que todavía no alcanza esa estatura. Parece costarle demasiado jugar recostado sobre la derecha. Se nota que cerca del área es desequilibrante, pero ayer no encontró los espacios como para imponer su juego corto. 
  • (6) Icardi: Padeció el síndrome de los centrodelanteros de la Selección. Infla las redes italiana pero en con la de Argentina no pudo gritar. De todos modos fue entre los argentinos el que más buscó, inclusive en el primer tiempo remató cuatro veces al arco de Fariña y solo la buena labor del arquerito venezolano le impidió convertir. Tiene jerarquía para fabricarse los espacios en el área y también para jugar cuando sale de ella.
  • (6) Acuña: Entró por Di María y se ubicó en el lugar que más rindió en Racing y ahora en Portugal. Por su desborde, Argentina llegó al empate. También colaboró con un par de retrocesos evitando contragolpes que se insinuaban peligrosos.
  • (5) Benedetto: Estuvo poco más de 30 minutos, entrando por Dybala. Estuvo muy cerca del gol tras un hermoso pase de Messi pero falló en el control de la pelota. 
  • (-) Pastore: Entró por Icardi, tal vez para probar si el jugador de PSG lograba asociarse con Messi.