Un nuevo negocio inmobiliario con tierras públicas avanza en el sur de la Ciudad de Buenos Aires. El PRO logró sortear la primera de dos instancias legislativas para aprobar un polémico proyecto que pone a la venta dos parcelas en el barrio de La Boca, donde se prevé construir un complejo conocido como Torres Catalinas Sur II. 

El macrismo contó con el apoyo del nuevo interbloque, Vamos Juntos (compuesto por el PRO, la Coalición Cívica y Confianza Pública), que le permite tener mayoría automática por primera vez desde que gobierna la Ciudad. La votación se llevó a cabo con la presencia de vecinos de la zona, que habían presentado otro proyecto para construir viviendas sociales y crear un espacio verde de uso público.

Sin embargo, la voluntad del PRO se impuso con la aprobación de un cambio de normas urbanísticas con la finalidad de permitir la construcción de torres de hasta 90 metros de altura y que podrían albergar hasta 5 mil nuevos habitantes. 

Además, se aprobó un convenio entre el Gobierno de la Ciudad y la Agencia de Administración de Bienes del Estado, ya que las tierras pertenecían al Estado nacional. Ahora serán rematadas. En total, ambas parcelas tiene unos 27 mil metros cuadrados y fueron tasadas en 330 millones de pesos por el Banco Ciudad. Uno de los predios tiene incluso un valor menor al de mercado, ya que los terrenos fueron utilizados por YPF y deben descontaminarse para poder destinarlos a vivienda.  

El Observatorio del Derecho a la Ciudad denunció que el convenio firmado entre el Gobierno y la AABE tuvo como ”condición suspensiva la autorización por decreto presidencial de la venta de los inmuebles”. “No se establece la obligatoriedad de la aprobación de la venta de los terrenos por el Congreso Nacional como lo establece la Constitución de la Nación. Esto es una violación constitucional grave. Formar parte del plan sistemático que tiene el PRO para privatizar tierras estatales sin aprobación del Congreso”, denunciaron.

Los vecinos de la Boca denunciaron en el recinto que “se trata de una iniciativa para habilitar la construcción de un emprendimiento inmobiliario de gran envergadura en los terrenos que se nombran como Catalinas Sur 2” y presentaron una acción de amparo. La denuncia de los vecinos fue acompañada por el kirchnerismo y la izquierda. 

“Desde el Frente para la Victoria creemos que la venta de terrenos públicos se debe llevar adelante solamente si esto trae un beneficio para nuestros vecinos, en este caso la norma que vamos a aprobar permite que se construyan torres de hasta 30 pisos y eso no va a mejorar la vida de los vecinos de La Boca”, dijo Paula Pennaca, legisladora del FpV.

Por su parte, la legisladora del Frente de Izquierda, Laura Marrone, aseguró que el Gobierno de la Ciudad quiere “entregar terrenos para la especulación inmobiliaria, para negocios y no para favorecer fines productivos. Además, hay que decir que en ese lugar hay terrenos contaminados que no permiten ser habitados; no se están cumpliendo con las normas de protección ambiental vigentes". Y el diputado del Partido Socialista Auténtico, recogió la denuncia del Observatorio del Derecho a la Ciudad, y pidió “recordar que ya ha habido otro tipo de venta de tierras por parte de autorizaciones de esta Legislatura vendiendo tierras del Estado Nacional sin pasar por el Congreso Nacional. Hoy se está repitiendo este mecanismo, con el cual no estamos de acuerdo”.