San Lorenzo derrotó anoche a Lanús por 2-0, en el partido de ida por los cuartos de final de la Copa Libertadores jugado en el Bajo Flores. La revancha se disputará el próximo jueves 21 en La Fortaleza.

Ambos equipos llegaban con la urgencia de torcer un comienzo de segundo semestre alejado de las expectativas. Porque el Ciclón pasó a los cuartos del máximo torneo continental sufriendo en los penales ante Emelec, después de perder 1-0 en los noventa minutos (en Ecuador había ganado 1-0). Además, en su debe se anotaban la eliminación de la Copa Argentina, a manos de Deportivo Morón, y los empates ante Racing y Central, por la Superliga. Antecedentes similares exhibía Lanús, que pasó a esta llave con una victoria 1-0 sin lucir ante The Strongest (en Bolivia habían igualado 1-1), pero que después cayó por la Copa Argentina ante Unión y fue goleado por Talleres y vencido por Boca, por la Superliga. A la hora de explicar esas performances, uno y otro equipo hablaban de que lo importante era la Copa Libertadores, el objetivo del semestre.

Y en pos de avanzar en la conquista de ese objetivo, el local arrancó el partido instalado en el campo rival. Esa presión le dio las dos primeras chances de abrir el tanteador, con una volea de Cerutti que pegó en un defensor y se fue al corner. Precisamente, a la salida del tiro de esquina estuvo cerca Blandi, pero la jugada volvió a finalizar en corner. Le costaba al Granate salir del encierro, porque los hombres del Ciclón trababan los circuitos de pase en el mediocampo y desbarataban los intentos de asociarse de la visita con relativa facilidad.

El transcurrir de los minutos y la falta de contundencia del once de Aguirre serenó a los de Almirón, que lograron aquietar el vértigo de San Lorenzo a partir del traslado parsimonioso y prolijo de la pelota. Claro que tampoco conseguían profundidad. Esa monotonía se quebró sobre los 20 minutos con un remate de Mussis que obligó a una buena respuesta de Andrada. Cinco minutos después el exigido fue Navarro, que tapó abajo el zurdazo de Pasquini, tras un buen toque de Sand pivoteando un lateral.

El cotejo estaba planteado entre un local que proponía, pero que sólo inquietaba por la banda izquierda con el tándem Rojas-Merlini, y un visitante que, extrañamente, volcaba más esfuerzos en destruir que construir. Pero la mayor ambición de San Lorenzo tuvo premio sobre los 33 minutos, cuando Blandi aprovechó un pase filtrado de Mussis para ganarle las espaldas a Braghieri y García Guereño y marcar el 1-0 ante la desesperada salida de Andrada.  

Apenas iniciado el complemento, San Lorenzo estiró diferencias, cuando Blandi marcó el 2-0 de penal, sancionado a Gómez por una infracción en contra del goleador azulgrana. Dos tantos abajo, Lanús decidió ir por el descuento. Se adelantó, pudo elaborar más juego asociado y tuvo una chance clara de gol en un remate que Navarro le tapó a Sand, aunque dejó amplios espacios que San Lorenzo no logró capitalizar para marcar un tercer gol que habría dejado la serie casi sentenciada.