Una dulce Villa Crespo

Pablo Mehanna

Entre las avenidas Warnes y Corrientes, en una zona más residencial que comercial, está Del Fino, un local pequeño y todavía con aroma a nuevo, dedicado a las tortas y los dulces. El lugar tiene una puesta sencilla y cálida: utensilios de cocina aquí y allá, frascos con especies o frutos secos, buena iluminación y una heladera mostrador que exhibe la oferta. Todos productos elaborados en el día (los pasteleros llegan bien temprano, casi en la madrugada, explican), que lucen frescos y con esa pátina de lo hecho artesanalmente.

Los budines ($37 la porción, $275 entero) son esponjosos y con muy buena humedad. Especialmente ricos el de banana y el de naranja con chocolate y unas adictivas cascaritas caramelizadas. El lemon pie sale con buena acidez, como debe ser –pero que tantas veces falla–, con merengue perfecto y masa sablée de buena manufactura. Si bien hay algunas opciones frutales (con frutos rojos o banana), la casa se inclina por los postres bien golosos, como el brownie con dulce de leche o la chocotorta. No faltan clásicos como la tarta de ricota o el Postre Rogel. Todas se pueden pedir en tres tamaños: individual, mediana o grande ($66, $400 y $550 respectivamente), y si se busca una opción en particular, se recomienda reservar.

Las bandejas de petit fours ($495) ofrecen pequeños bocados (¡qué ricas las masitas!), de 10 variedades, una buena opción por cantidad y variedad: cheese cake, mousse, coco con dulce de leche, streussel de manzana, entre otros. También hay disponibles cookies de tres sabores por unidad y docena, además de una degustación de cuatro postes individuales por $240.

El packaging merece mención aparte, por lo práctico y original: hermosas cajas de cartón para cada tamaño, con unas manijas que permiten mantener los manjares a salvo de golpes y abolladuras. Si bien el local a la calle con atención al público tiene apenas unos meses de vida, su dueño lleva casi una década en la pastelería profesional, como tercera generación de pasteleros. Sabe lo que hace. Y se nota. 

Del Fino queda en Aráoz 162. Teléfono: 4854-4235. Horario de atención: lunes a sábados de 10 a 19.


La gran religión nacional

Pablo Mehanna

Si hay tiendas orientadas al tango, al mate o al fútbol, ¿por qué no una dedicada al dulce de leche? Esa fue la pregunta que se hicieron los hermanos Luis y Matías al bajar de los cruceros en los que trabajaban. La idea fue tomando forma hasta convertirse en Dulce de Leche & Co, negocio monoproducto cuyo objeto es la gran pasión dulzera argentina, sobre cuyo origen sobran las historias (y diferentes formas de nombrarlo) por toda Latinoamérica.

El negocio es pequeño y simpático, con estanterías que recubren paredes y vidriera exhibiendo una variedad poco frecuente del dulce nacional. La atención es amable y dedicada. Mientras explican con paciencia los características y orígenes de cada marca, la casa invita a degustar los productos con pequeños descartables en un sector diseñado ad hoc. 

El local exhibe 50 variedades de 35 pequeños productores (el más conocido es el –a esta altura– clásico Chimbote) de todo el país, mucho de ellos prácticamente inhallables en la ciudad. Por ejemplo, de Salta, elaborado por una empresa familiar con tambo propio de vacas alimentadas a pasto, llega Campo Quijano ($170 el kg), de tono oscuro y etiqueta elegante, con una cremosidad que lo transforma en vicio apenas abierto el frasco. Excelente también el que viene de Del Valle, en el Partido de 25 de Mayo, elaborado por una Escuela Agrotécnica Salesiana (desde $125). Para los que buscan cuidar a línea, el Doña Magdalena, con Stevia, logra un punto perfecto sin el retrogusto que muchas veces generan los endulzantes reducidos en calorías (desde $80). Hay opciones con almendras, con nueces, con crema, con coco y hasta algunos de leche de cabra u oveja, realmente especiales. La oferta se completa con licores, alfajores y algún que otro merenguito relleno, 

La logística siempre es un tema difícil de resolver para pequeños fabricantes distantes de la gran urbe porteña, y ahí es dónde DDL & Co se hace fuerte, acercando productos desde puntos lejanos como Puerto Madryn, El Bolsón, Bariloche y Tucumán. Un homenaje merecido y necesario a la gran religión dulcera de Argentina.  

Dulce de Leche & Co queda en Cabrera 5061. Teléfono: 4833-3440. Horario de atención: lunes a sábados 12 a 20; domingos de 14 a 18.


Un clic y tortas

Pablo Mehanna

Si bien sobran ofertas de pastelería on line, sin local físico a la calle, esa sobreabundancia de opciones muchas veces hace difícil distinguir lo que es bueno de lo que es regular, y lo que es regular de lo que es directamente malo. Entre tanta incertidumbre y malas experiencias, brilla muy por encima de la media Gigi, tanto por su sabor y presentación como por la inmejorable relación precio calidad que muestra. Una combinación nada fácil de conseguir en otros lados. En esto tiene mucho que ver Gisella Cigarrán, alma máter del proyecto, graduada en bellas artes y una apasionada de la cocina, dos detalles que se notan luego en cada una de sus preparaciones. Lleva toda una vida cocinando tortas y masas, aunque hace cinco años que lo hace de manera profesional

En el sitio web se encuentran algunas de las variedades de tortas que ofrece, entre ellas muchos clásicos infaltables como lemon pie, mousee de chocolate, rogel o brownie, todos alrededor de $400 las tortas de 12 porciones (si bien se pueden pedir en el tamaño deseado). 

Si se trata de tortas de cumpleaños, la de bizcochuelo de naranjas con baño de chocolate (es posible solicitarla enorme, como por ejemplo para 70 personas, con casi 7 kilos de peso) es una obra de ingeniería. Pero también hay disponibles opciones mucho más pequeñas y aptas reuniones, como los shots de tiramisú, mousse de chocolate o de frutillas merengue y dulce de leche. Todo bien presentado, con estética impecable, sabores bien definidos, sin exceso de azúcar, buen balance de acidez cuando utiliza frutas y con materias primas de calidad.

En Gigi también preparan una buena variedad de bombones ($1000 el kg, solo por encargo), mientras que todos los jueves publican en la página de Facebook una oferta con pequeños bocados dulces que, por $130 a $150, resultan una verdadera ganga. 

Para un catering entero, una torta de cumpleaños o una merienda de unos pocos, esta pastelería on line cumple y dignifica.

Pedidos por www.gigi.com.ar o en www.facebook.com/gigischocolates. Entrega a domicilio.