Omar Plaini es titular del sindicato de Canillitas, consejero del Partido Justicialista bonaerense y presidente del Club Atlético Los Andes, de Lomas de Zamora. El senador provincial, que finaliza su mandato en los próximos días, dialoga con BuenosAires/12 y relfexiona luego de la derrota electoral.
--¿Qué conclusiones saca de la elección del domingo pasado?
--Creo que nosotros debemos mirar para adentro y hacer un análisis de por qué se llegó a esto. Hay que ir a lo más profundo de la sociedad, porque está claro que la dirigencia política no le ha dado respuesta a la mayoría de los problemas que tiene la ciudadanía, y todos tenemos un grado de responsabilidad de acuerdo a la jerarquía que se tenga y al rol que se haya cumplido.
--¿En qué fallaron?
--Hay que hacer un mea culpa, dijimos que volvíamos mejores y pasó lo contrario, disputamos y discutimos a la luz del día y de cara a la sociedad, y eso tampoco fue bueno. Acá va a haber que reorganizar, repensar y reformular lo más profundo del peronismo. También es cierto que, desde 1983 para acá, al sindicalismo nunca se le dio el rol que debería tener en las decisiones de las políticas de Estado. Siempre hemos sido periféricos en eso, y una autocrítica nuestra, en ese sentido, es que dejamos de ser un sector de poder para convertirnos en un factor de presión, lo cual no está bueno.
--¿Cómo se recupera ese rol?
--Para mí, el peronismo es una estrategia de poder de la clase trabajadora, y ese clase no ha tenido la representación suficiente que amerita tener en esta concepción que tengo del peronismo. El movimiento sindical no sólo es columna vertebral, es un espejo dónde debe mirarse la política. Somos un copoder de la política. A la hora de administrar somos eficientes, y la dirigencia del peronismo debe tenerlo en cuenta.
--¿La estrategia para recuperar a los votantes de Milei aparece luego del mea culpa?
--Hay que reconocer que el 55 por ciento que votó a este hombre electo Presidente atraviesa vertical y horizontalmente la sociedad. Luego de esa supuesta luna de miel que se da entre un Presidente recién electo y la sociedad, eso se definirá cuando los que lo votaron se den cuenta que las medidas que toma Milei los afecta a ellos. El peronismo deberá reconfigurar su liderazgo y repensar algunos temas. No podemos estar votando cada dos años, las PASO son un instrumento que no sirve más, está agotado. No podés estar con la sociedad votando tres veces en un año, eso agobia y agota. Hay una parte de la sociedad que, enojada porque la política no le dio respuesta, ya sea por pobreza, indigencia, inflación o el fondo, votó una salida y pasó esto, un hombre sin historia es Presidente. Todo eso debe evaluarse en un análisis profundo puertas adentro, para ver cómo y por qué pasó.
--¿Hay alguna otra razón, más allá de los fracasos del gobierno?
--La gran parte votó enojada. No votó en favor de él, votó contra nosotros porque no dimos respuestas. Está bien, tuvimos la pandemia, la guerra, la sequía, el FMI, pero cuando estás en la gestión tenés que dar respuesta. En la política, tu función es mejorar la calidad de vida de los habitantes, y si no lo lográs, la sociedad busca cause por otro lado. Hay que dar respuesta y mover recursos, en un mundo altamente concentrado, financializado y especulativo, contra eso se lidia, las tendencias son internacionales. Estamos ante una sociedad muy compleja, líquida, volátil, efímera. Si no hacemos un análisis, no reflexionamos y sólo buscamos culpables, repetiremos errores y estaremos a contramano de lo que sucede.
--¿Qué sensaciones tiene hoy, una semana después?
--El resultado electoral me deja preocupación por las ideas que expresó el propio Milei, que hizo campaña con una motosierra y se puso en contra de todos los criterios y las concepciones políticas que uno tiene. Yo creo mucho en el Estado como articulador, como promotor, orientador y regulador en todo consenso socioeconómico. Él está en las antípodas de eso, y encima le agrega virulencia verbal. Provengo de lo más profundo del peronismo y del movimiento sindical, la mirada que él tiene de la sociedad y del mundo es totalmente contraria a lo que creo yo.
--¿Le preocupa más que esté Mauricio Macri detrás?
--Milei fue al gobierno y Macri al poder, eso está clarisimo. Incluso, Macri hoy está definiendo, a 13 mil kilómetros de la República Argentina, la composición de los funcionarios que va a tener el presidente electo. Macri es el líder de la derecha, ha buscado en su momento el mundo concentrado capitalista cuando aprobaron la nueva intromisión del Fondo Monetario Internacional, que fue una decisión económica y política.
--¿Cómo afectarían las medidas de Milei en la provincia de Buenos Aires?
--Las medidas son globales, no analizo la política a nivel local, me lo enseñó Juan Perón. Primero analizo la política internacional, porque esas son las tendencias que después se dan en los países y en las regiones. No focalizaría aquí porque es un error político. Las medidas que implementará afectarán a toda la clase trabajadora, que a través de sus organizaciones sindicales de carácter permanente, ha logrado derechos y ha librado luchas que tienen una historia. Me preocupa todo el país, y como habitante bonaerense, me preocupa como a todas las provincias.
--¿Qué tipo de sindicalismo imagina como respuesta a las medidas que plantea?
--La dirigencia sindical fue muy clara, dijimos 'ni un paso atrás'. Lo que plantea el Presidente electo son medidas nocivas para los derechos de los ciudadanos. La CGT, en su momento, planteó quince puntos que fueron entregados a cada candidato en el debate presidencial, y el primero es mantener en vigencia el derecho al trabajo, que está expresado en los artículos 14 y 14bis de la Constitución Nacional.
--¿El peronismo debe definir ahora mismo un liderazgo?
--Primero hay que tomar distancia de lo que sucedió, porque ayuda al análisis y la reflexión. El movimiento peronista, luego de una profunda reflexión, debe replantearse qué es el peronismo en el siglo XXI. ¿Qué es? ¿Qué significa? Tenemos tres principios y ninguna fuerza política los ha superado ochenta años después. Hay que revisar los valores y entender por qué pasó lo que pasó. Milei decía estar contra la casta y ahora pone a la casta, y hay muchos hombres allí que pasaron por el peronismo. Entonces ¿Qué es lo que somos? ¿Una concepción ideológica, política y emocional? ¿O una pasantía para llegar a un cargo público? Hay que discutir y enriquecer el debate, después veremos quien va a liderar. En las sociedades modernas, por la velocidad que tienen, no hay tiempo de reflexionar. Mi profesión se ve afectada por eso, nadie toma un diario para analizar ni reflexionar nada.
--¿Qué ve en Axel Kicillof?
--Veo al mejor gobernador de la provincia de Buenos Aires en los últimos años, no tengo dudas. Será él quien determinará hacia dónde quiere ir y cómo quiere hacerlo. Fue reelecto porque hizo las cosas bien y mantuvo las condiciones de un Estado que articula, promociona, orienta y regula. Es un hombre preparado y muy capaz.
--¿Eso lo posiciona como una figura para encabezar la oposición?
--No me gusta hacer nombres propios. Hay que hablar mucho de las ideas, poco de las cosas y nada de las personas. El peronismo es una estrategia de poder de la clase trabajadora, y por ello estamos obligados a formar cuadros integrales, como enseñó Perón. No hay que formar cuadros sólo para la gestión, hay que preparar cuadros para la unidad básica, para el club de barrio, para la comunidad, la cooperadora, la parroquia y el sindicato. Si no logramos eso entramos en dificultades. Dirigentes hay muchos, cuadros dirigentes no hay tantos.
--¿Cuál es la realidad de los canillitas? ¿Cómo se reconfigura el panorama?
--Nosotros nos estamos reinventando, los diarios y las revistas dan un margen acotado. Sacamos una resolución mediante el Ministerio de Trabajo, donde incorporamos nuevos productos para la venta en los puestos, y así generar ingresos. Serán cuatro años duros, pero mi gremio ha demostrado siempre estar al frente de las luchas de los trabajadores y trabajadoras, es nuestra esencia y no vamos a traicionar nuestra rica historia. Sabemos de dónde venimos, qué queremos y a dónde vamos.
--Como presidente de Los Andes ¿Qué opina de las Sociedades Anónimas Deportivas que planteó Milei?
--Atentan contra los socios y las socias, que son los verdaderos dueños de los clubes, porque somos asociaciones civiles sin fines de lucro. En Los Andes tenemos el colegio, que es nuestro mayor orgullo. Se creó en 1972, cuando empezamos con la colonia. Tenemos 1400 matrículas, jardín, primario y secundario. Tenemos 20 actividades deportivas y patrimonios que son la Sede, el predio de Villa Albertina, y el Estadio. Todo pertenece a los socios. No creo en las SAD, estoy totalmente en contra y defenderé ese pensamiento. Hay familias vinculadas, con sentido de pertenencia, y todo eso no te lo da una SAD.