Alrededor de un millar de personas se concentraron en el Cacerolazo Educativo, en reclamo por "presupuesto universitario, boleto educativo y salario digno para docentes y no docentes".

La actividad fue impulsada por el Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la  UBA y adhirieron numerosos centros de estudiantes, sindicatos docentes como Ademys y AGD-UBA Filo, sectores de la cultura y asambleas barriales.

Violeta Alonso, dirigente de la agrupación estudiantil ¡Ya Basta! y secretaria de Lucha por el Presupuesto de la facultad, consideró que "la cursada está en peligro: el presupuesto asignado hasta ahora por el gobierno nacional a la UBA solo alcanza para mantenerla abierta hasta abril y una situación similar afecta a las demás universidades del país".

La dirigente estudiantil y organizadora del cacerolazo sostuvo que "los tarifazos brutales en el transporte y el ajuste en general harán más difícil para muchos estudiantes, especialmente para aquellos de familias trabajadoras, sostener los estudios universitarios".

"Al mismo tiempo, docentes y no docentes se encuentran sufriendo el plan de ajuste de Javier Milei con salarios de miseria y sin certezas sobre las paritarias de los próximos meses", agregó.

Por su parte, la dirigente del Movimientos al Socialismo (MAS), Manuela Castañeira, apuntó contra "la política de déficit cero del gobierno de Milei" que "se lleva adelante con profundos recortes a áreas sensibles y estratégicas del país, como por ejemplo la educación pública".

"Su plan fiscalista, cuyo principal objetivo es pagarle al FMI, implica el ahogo presupuestario de universidades, la eliminación de la paritaria nacional docente y el recorte del FONID, que compromete, por lo menos, al 10% del salario docente, entre otras medidas", afirmó.