El vocero presidencial, Manuel Adorni, descartó este martes la posibilidad de que el Gobierno aplique una nueva fórmula de actualización de las jubilaciones a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU)

"Por ahora, la fórmula por DNU no es una alternativa porque creemos que el debate es algo que se debe dar entre todos los sectores, que debe dar la política", sostuvo el portavoz en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada, echando por tierra las versiones que indicaban que el Poder Ejecutivo recurriría a un decreto para establecer un nuevo mecanismo de aumento para los haberes jubilatorios.

El diputado José Luis Espert, por su parte, dijo que habrá que esperar hasta después de Semana Santa para que el oficialismo "envíe la nueva versión de la ‘Ley de Bases’, donde estaría incluido el capítulo referido a la nueva fórmula previsional". 

Adorni dijo que el nuevo método de actualizaciones que evalúa el Gobierno "probablemente contemple algo elemental: que el jubilado no siga perdiendo contra la inflación como lo viene haciendo no solo desde la última fórmula, sino en los últimos 20 o 25 años". No hizo sin embargo mención al duro ajuste que la gestión de Javier Milei está aplicando en este sector.

"Cualquier fórmula va a contemplar que no se siga perdiendo poder adquisitivo. Por eso es un tema extremadamente delicado, siempre va a estar en el marco de la restricción presupuestaria y el equilibrio fiscal, que es innegociable. La fórmula jubilatoria va a seguir todas esas lógicas: que no perjudique al jubilado, que cumpla con el equilibrio fiscal y que se discuta por todos los sectores", afirmó.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, José Luis Espert, anticipó en diálogo con el diario La Nación que el oficialismo decidió postergar hasta después de Semana Santa el inicio del debate de una nueva fórmula de movilidad jubilatoria en el Congreso.

Vamos a esperar a que el Poder Ejecutivo envíe al Congreso su nueva versión de la ‘Ley de Bases’, donde estaría incluido el capítulo referido a la nueva fórmula previsional. Eso será después de Semana Santa. No podemos empezar la discusión sobre la nueva fórmula sin contar previamente con el proyecto oficial”, señaló.

“Espert tiene que entender que es presidente de una comisión de otro poder del Estado en la que no cuenta con mayoría propia, no se la puede apropiar. Igualmente esperamos que el radicalismo sí convoque a Previsión y que el PRO no insista en mandar el tema a asesores”, advirtió al respecto el diputado de la Coalición Cívica Juan López, dando a entender que un sector de la oposición no está de acuerdo con seguir postergando un tema tan sensible.

La semana pasada, de hecho, el interbloque de Hacemos Coalición Federal de Miguel Angel Pichetto había pedido una sesión especial en la Cámara de Diputados que tenía el objetivo de tratar un proyecto de la Coalición Cívica para modificar la fórmula de movilidad jubilatoria y atarla a la inflación, incluido el 20,6% sufrido en enero de este año. 

Sin embargo, la convocatoria -que contó con el apoyo de Unión por la Patria, el Frente de Izquierda, partidos provinciales y un sector pequeño de la UCR- no alcanzó los números necesarios para dar inicio a la sesión: solo se sentaron en sus bancas 119 diputades, mientras que hubo 138 legisladores que decidieron no bajar al recinto.

La definición de un nuevo mecanismo de aumentos para jubilados y jubiladas se convirtió en un tema urgente para varios legisladores,  ya que sus haberes sufrieron un brusco recorte a partir del ajuste fiscal que comenzó a aplicar el Gobierno, que se vio obligado a otorgar un aumento este mes -de 27,18%- y un bono. Actualmente, la jubilación mínima alcanza apenas los $134.445 y, si se suma el bono de $70.000, llega a $204.445 brutos.