En la mañana del pasado lunes 25 de marzo, la tranquilidad en la Casa de Gobierno de La Rioja se vio abruptamente interrumpida por una amenaza de bomba que obligó a la evacuación del edificio y desencadenó un importante despliegue policial en la zona. Un llamado anónimo al 911 alertó sobre la presencia de explosivos en las instalaciones gubernamentales, lo que llevó al personal policial a activar de inmediato el protocolo de seguridad.

El ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Miguel Zárate, explicó que tras recibir la llamada se procedió de inmediato a evacuar el edificio y se desplegó personal especializado en manejo de explosivos para inspeccionar el lugar. "Se están haciendo las actuaciones que corresponden para determinar si se trata de una falsa alarma y en ese caso haremos las actuaciones que corresponden", afirmó Zárate, destacando la seriedad con la que se está abordando la situación.

Por su parte, la secretaria de Comunicación y Planificación Pública de La Rioja, Luz Santangelo, expresó su preocupación ante lo sucedido, instando a no subestimar la gravedad de la situación. "Muchas familias preocupadas, compañeros y compañeras interrumpiendo su trabajo por la amenaza de bomba. Ya se identificaron los números desde dónde hicieron el llamado. La escalada de violencia es brutal", señaló Santangelo a través de sus redes sociales.

Hasta el momento, se desconocen los motivos que impulsaron la llamada anónima, aunque fuentes reservadas indicaron que hay una persona demorada en relación con el incidente. Las autoridades continúan investigando para esclarecer lo sucedido y garantizar la seguridad de la comunidad.

La amenaza de bomba en la Casa de Gobierno de La Rioja ha generado preocupación en la región, recordando la importancia de mantener la vigilancia y la respuesta efectiva ante posibles situaciones de riesgo.