Para los jubilados y jubiladas cada vez es más difícil acceder a los medicamentos. Es que se dio una “tormenta perfecta”, según los especialistas. Sin control del Gobierno, los medicamentos subieron un 146 por ciento entre diciembre y marzo. Las prepagas pegaron un salto similar. Y las jubilaciones cayeron hasta un 24 por ciento en el mismo período, por lo que el feroz ajuste que ha puesto en marcha la maquinaria libertaria la está pagando uno de los sectores más vulnerables.

Esto hace que frases como “dame los que no pago”, en referencia a los medicamentos que cubren las obras sociales, se vuelva habitual en un mercado que no tiene que ver con el gusto y la decisión, sino con la salud. Es decir, en un mercado con una demanda inelástica, donde no puede –o no debería– postergarse la compra.

Así lo explicó Leonardo Fernández, vocero del Colegio de Farmacéuticos de Lomas de Zamora, quien por AM750 aseguró que “el Estado le sacó el cuerpo a la salud” y la “tomó como una mercancía más”, sin tener en cuenta que no acceder a medicamentos impacta directamente en la calidad de vida de miles de personas.

“Es muy lamentable. El afiliado de PAMI tiene una gran cobertura. Pero al aumentar tanto el medicamento, aún con una gran cobertura, es inaccesible. Ahí vemos cómo los afilados de PAMI, por ejemplo, dejó de consumir el Daflon porque hace rato tiene cobertura de descuento y no del 100 por ciento”, explicó.

Este ejemplo concreto muestra cómo la crisis y el ajuste en los haberes jubilatorios le cambia drásticamente la calidad de vida a las personas. Sin acceder a este medicamento venotónico los pacientes podrían ser propensos a sufrir una trombosis o una flebitis y otros grandes problemas de salud.

En los datos, esto también tiene su correlato: “La venta cayó un 45 por ciento. Es gente que abandonó sus tratamientos y está empeorando su salud. Todo eso nos da una angustia importante. Porque son nuestros pacientes, nuestros vecinos, nuestros clientes de cada día y vemos cómo no tienen cómo acceder a sus medicamentos”.

“Y estamos hablando del sector PAMI. Ni hablar de los que no tiene cobertura médica. Se está viendo también un trasvasamiento. Gente de clase media, donde los hijos tiene un poco más de solvencia, donde le pagaban la prepaga a sus padres. Ahora se ve cómo se está dejando de pagar y PAMI se está sobrecargando”, finalizó.