La exministra de Economía Felisa Miceli explicó por AM750 qué se esconde detrás del 11 por ciento de inflación en marzo que tanto celebró el Gobierno y explicó por qué es cuestión de dos o tres meses más para que la sociedad entienda que esta escalada inflacionaria no conduce a un futuro más auspicioso, sino a más recesión y desempleo.

La columna de Felisa Miceli

Mientras pensaba en los precios y el tipo de cambio y el cierre de fábricas analizaba qué contentos que se ponían a decir algunos periodistas cuando la inflación avanzaba en la época de Massa. Decían que de esta manera era imposible mantener la adhesión popular. Cosa que ocurrió. Y cómo disimulan ahora este tremendo aumento de precios al que venden como una 'disminución de la inflación'.

¿Cuando Massa tenía el 7 por ciento era una barbaridad y ahora el 11 por ciento es una baja de la inflación? La verdad es que en Argentina tendríamos que preguntarnos muchas cosas. Especialmente los oyentes, porque ellos son los que pueden multiplicar esta explicación. El 11 por ciento mensual es la inflación más alta del mundo. Viene Argentina, Zimbabue, Turquía y Venezuela.

Todo suma tanto, que uno se pregunta cómo hace una familia para vivir entre el alquiler, entre las expensas. La verdad es que hay una decepción tan grande de la gente con el peronismo, con lo que fue el Gobierno del Frente de Todos, que se atan a esta cuestión de darle a Milei alguna chance de que esto sea algún pasaje difícil hacia una mejor realidad. Cosa que nadie ve.

Uno ve una peor realidad. Porque a esta caída del salario real, pérdida del poder de compra de todos, se está dando con el fenómeno de una secuencia de recesión, inflación y desempleo. El desempleo se da por la caída en las ventas. Es muy difícil mantener un comercio y ni te hablo de una fábrica con esta tremenda caída que hay en la demanda interna. El mercado interno está desplomado y aun así la inflación es del 11 por ciento.

Esa distancia entre lo que la gente esperaba y lo que es se va a dar en poco tiempo. No sé cuándo. Si dos meses o tres meses. Pero esto es algo que la gente va a empezar a darse cuenta. Porque no hay ningún tipo de rol del Estado en controlar o cuidar los precios de la economía y eso perjudica. No hay ningún tipo de impedimento. Se alienta a que haya aumentos.

Así que creo que estamos en una situación económica tremenda. Ayer despidieron a 200 empleados de una exfábrica de Drean en Córdoba, en Luque, donde empleaban a 900 personas. Imagínense 200 familias sin ingresos y cómo se multiplica eso con la caída que genera en el mercado interno. Eso indirectamente está afectando a los comercios de la zona, a los comercios, a las actividades que se realizan. Tenemos un panorama por delante complicadísimo. 

*Felisa Miceli es exministra de Economía y Producción de Argentina durante el gobierno del presidente Néstor Kirchner en el período 2005-2007.