El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, llamó por teléfono a su colega Mauricio Macri para transmitirle sus condolencias por la muerte de los cinco argentinos provocada por el atentado ocurrido ayer en la ciudad de Nueva York.

Según un comunicado difundido por la Presidencia de la Nación, Trump llamó a la residencia de Olivos y dialogó con el presidente Macri, a quien le trasmitió y manifestó su “apoyo y solidaridad con las familias”.

Más temprano, Macri había aprovechado el caso de los argentinos muertos durante el ataque para promocionar su política de refuerzo de las fuerzas de seguridad bajo el mote de “lucha antiterrorista”. 

La muerte de los que para el jefe Estado eran “cinco jóvenes emprendedores” fue el puntapié inicial para un tramo de su discurso sobre seguridad en el sistema financiero global, durante una reunión del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) y el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat).

“Un nuevo atentado terrorista en Nueva York. Fueron víctimas cinco rosarinos, cinco jóvenes emprendedores. Imagino que con lindas familias. Es algo que nos ha pegado mucho, a mí en particular. Todos tenemos que estar comprometidos de pies a cabeza en la lucha contra el terrorismo”, expresó el mandatario frente a una platea de empresarios y dirigentes.

El martes, cuando se conoció la noticia de que cinco de las ocho víctimas del atentado en un ataque ocurrido en la zona sur de Manhattan eran argentinos, Macri escribió en Twitter: “Profundamente conmovido por las trágicas muertes de esta tarde en NY. Nos ponemos a disposición de los familiares de las víctimas argentinas”. Acto seguido, agregó: “Volvemos a hacer un llamado de paz para que estos horrores terminen”.

Por otra parte, el canciller argentino, Jorge Faurie, condenó los atentados que hacen “imposible sentirse 100% seguro” en cualquier ciudad del mundo, en referencia al ataque cometido el martes en Nueva York. Faurie repudió esta “nueva modalidad de vida a la que tenemos que irnos acostumbrarnos todos, que es vivir con la posibilidad de un atentado en cualquier momento sin ninguna razón”, al tiempo que remarcó que el ataque fue cometido “en una ciudad de las más vigiladas del mundo desde 2001”.