La cantante María Martha Serra Lima murió en la madrugada de ayer, a los 72 años, en Miami, donde vivía desde 1983 y donde estaba internada en grave estado, tras someterse a dos intervenciones quirúrgicas en la espina dorsal, para paliar los fuertes dolores que sufría en la espalda y en las piernas, y al descubrírsele un cáncer de páncreas. Fue una figura destacada de la canción romántica de las últimas décadas, con llegada a toda Latinoamérica y a la comunidad hispana de Estados Unidos. Y aunque sus declaraciones públicas no la sostendrán en el recuerdo como una artista de esas “cercanas a la gente”, probablemente sí logren algo por el estilo sus canciones: Serra Lima fue la que a principios de los 80 recuperó, por ejemplo, el bolero, con toda la carga afectiva que esa música que había dejado de escucharse a nivel masivo traía guardada consigo.

Los allegados de la cantante contaron que su calidad de vida se había deteriorado en el último tiempo, por los constantes dolores que sufría. “La columna la tengo toda mal. Ahora camino con un bastón para ayudarme porque me caigo todo el tiempo. Una pierna la siento menos. Le tengo terror a las caminatas. Me duele estar parada y estar sentada. Ya no sé lo que es ir a un shopping a pasear. O me opero o no camino más”, había contado ella a la prensa. Se le hicieron dos intervenciones quirúrgicas, a fines de septiembre pasado, y a principios de octubre se informó que tenía por delante una larga recuperación. Sin embargo el cuadro se complicó y, tras un breve tiempo en terapia intensiva, la cantante falleció.

Serra Lima nació en Buenos Aires el 19 de diciembre de 1944, y se lanzó como cantante ya “de grande”, a fines de la década de los 70. “Yo cantaba desde chica, pero mi familia no me dejaba cantar. Así que recién empecé cuando murió mi papá, cuando yo tenía 34 años”, contó en una entrevista. Ya casada, tuvo que esperar a que su padre muriera, y a divorciarse de su primer esposo, para lanzarse profesionalmente. Su trayecto como artista radicada en la Argentina coincidió entonces con los años de la última dictadura: en 1976 grabó el primero de sus 46 discos, que llevaba su nombre, y en 1983 decidió irse a vivir a Miami, tras un breve paso por México. El primer tema que la hizo conocida a nivel internacional fue “Dudo lo que pasa (qué es lo que tiene él)”, que apareció en su segundo disco, Entre no-   sotros, de 1980, que alcanzó cifras record de ventas. Fue el director artístico de CBS Columbia de la época, Mochín Marafioti, quien le sugirió a la artista interpretar esa canción que unos años antes había grabado la puertorriqueña Sophi.

Su particular modo de frasear y sobre todo su voz, de gran sonoridad y con un registro contralto poco frecuente en las intérpretes femeninas, se expresó en temas como “A mi manera” –otro de sus grandes éxitos– “Algo contigo”, “Cosas de la vida”, “Usted”, “Los enamorados”, “Soy lo prohibido”, “Cenizas”, “Lo mejor de mí” y “Quién soy”. Vendió más de siete millones de discos, entre los que hay veinte Discos de Oro y Platino. Alguna vez llenó el mítico Madison Square Garden de Nueva York. Cantó a dúo con Sandro, Valeria Lynch, Estela Raval, Paz Martínez. En 2007 grabó con el Trío Los Panchos el disco Esencia romántica, que tuvo un gran éxito de ventas. En 2013 fue una de Las elegidas, un show que la reunió en el Teatro Colón con sus colegas Valeria Lynch, Sandra Mihanovich, Lucía Galán, María Graña, Julia Zenko, Marcela Morelo, Fabiana Cantilo, Patrica Sosa y Virginia Tola. Ese mismo año grabó María Martha international, su último disco. 

Así como dejaba su marca, siempre contundente, en el escenario, Serra Lima sonaba del mismo modo en sus declaraciones públicas, entre lo simpático (contó que tuvo un romance con Sandro, y él le escribió el tema “Cosas de la vida), lo “polémico” y lo ofensivo. Y aunque siempre contó con el paraguas benefactor de la prensa que celebra a las celebrities, no dejaron de chocar su defensa a la pena de muerte, su condena al amor entre personas del mismo sexo, o sus particulares opiniones musicales (“no me gustaban The Beatles porque pusieron a los padres y a los hijos en contra”). Quedan sus canciones.