Visibilidad, reconocimiento, empoderar: así convoca la Asociación Cultural Argentino Brasileña “A Turma da Bahiana” junto con la Dirección General de Colectividades al festival Buenos Aires Celebra la Comunidad Afro, un encuentro habitado por música afrodescendiente, sonidos del Perú, música Yoruba, del Caribe, reggae, funk, danzas, teatro, talleres, desfiles y muchas otras actividades que promueven la visibilización de la comunidad afrodescendiente para luchar contra toda forma de violencia y discriminación. En diálogo con Soy la música y activista Acus Kay, que lidera su proyecto Acus y es también tecladista y segunda voz del grupo de lesbian reggaeton Chocolate Remix, habla de la segregación estructural instalada en estas tierras, y con el micrófono y el teclado como herramientas de destrucción masiva contra los prejuicios, clama por la urgencia de mostrarse, empoderarse y combatir con la voz y el cuerpo a puro ritmo de funk y hip hop latino.

¿Cuál es el foco principal del festival?

-Los censos avalan que hay un 5% de población afrodescendientes en el país, lo que significa que Argentina también es afro. El negacionismo que se vive acá es una forma neta de discriminación, es un decir “acá no hay negros”. Por medio de estas acciones estamos buscando la reivindicación de nuestro colectivo. En muchos países de Sudamérica lo negro tiene un significado peyorativo.

Significado instalado ya desde el lenguaje cotidiano

-Muchas palabras provienen de idiomas africanos y acá están tomadas con un sentido negativo, como “quilombo” o “mucama”. Ahí te das cuenta de que hay una cosa muy turbia. Este festival viene a denunciar eso, a reivindicarnos, a romper con ese negacionismo que sostiene que la Argentina es una nación blanca, cuando ni siquiera se tiene en cuenta de que hasta el tango deriva del candombe afro uruguayo y que su nombre significa “reunión” y “fiesta” en los idiomas africanos. Mirá hasta qué punto Argentina tiene afrodescendientes.

¿Y eso se traduce en tu música como una forma de militancia?

-Visibilizo la causa afrodescendiente, estoy a favor del trabajo sexual y contra la gordofobia. Hace un año y pico que mis letras viraron hacia un lugar más militante, como cuando canto “medime la cintura, eso me empodera”. Voy a estrenar un tema que se llama Mi propio paraíso, que también habla de los negros, de una mujer, que soy yo, que dice: “Traspasa la energía, los tambores se calientan, los leones rugen sexy, las mujeres se empoderan. Mis rimas no tienen pasaporte, no piden permiso, piden horizontes”. Me interesa que mis canciones entretengan pero que digan todo lo que yo soy: que soy negra, que soy gorda.

La militancia también en la imagen y en los cuerpos

-Desde que era muy chica tener este pelo afro era un bajón, o ser gorda. Muchas veces inclusive yo misma me negaba, hasta que descubrí que podemos empoderarnos en base a nuestros rasgos, a lo que somos, y liberé mi música, trabajo mucho más que antes. Lo primero que me pasó es ir a comprar ropa y que no me entrara. Parece algo muy banal, pero no podía comprarme ropa. Empecé a investigar y me contacté con Brenda Mato, que es una modelo Plus Size que milita contra la gordofobia, y comencé a generar eventos dentro de lugares y espacios que forman parte del circuito queer.

¿Hubo ruido en el hecho de que uno de los entes que ponen dinero para el festival es el Gobierno de la Ciudad, ideológicamente muy alejado de estas causas?

-Cuando empecé a promocionar esta fecha me saltaron algunos comentarios tipo “PROafro” y esas cosas. Nosotros sacamos plata de todos lados, también de los stands, de lo que se vende. En un punto no importa ya si nos da un poco de plata este gobierno o cualquiera, se trata de que los negros copemos esta plaza. l

Soyacus.bandcamp.com
Sábado 11 de noviembre desde las 13 
en Plaza República Oriental del Uruguay, Av. Del Libertador y Tagle.