La primera vez que leí el Cruck Up, de Fitzgerald, sellé mi vínculo con él, el de los amores para siempre, por una frase, o mejor dicho, por la comprensión y transmisión –la comunicación – de una idea. Esta: “La prueba de una inteligencia de primera clase es la capacidad de retener dos ideas opuestas en la mente al mismo tiempo, y seguir conservando la capacidad de funcionar. Uno debería, por ejemplo, ser
Farsantes

Este es un contenido periodístico exclusivo para Soci@s, para leerlo completo subite a nuestro colectivo.


![function body_3(chk,ctx){return chk.f(ctx.getPath(false, ["author","title"]),ctx,"h");}](https://images.pagina12.com.ar/styles/width470/public/2016-11/sandra-russo.png?itok=-rN_G5U1)

