Con la reproducción de 280 escuchas, la Fiscalía a cargo de la acusación contra la banda de Los Monos apuntó a demostrar las identidades de quienes se comunicaban y la organización que tenían. En la séptima jornada de juicio, los fiscales dieron un golpe de timón al modo de incorporación de las escuchas al juicio, tras las "demoras" que atribuyen a las objeciones de la defensa. En los pasillos del Centro de Justicia Penal se decía ayer que la actitud de la defensa "parece de desesperación". Fuentes de la Fiscalía indicaron que se ideó una nueva estrategia para evitar "interrupciones": dividir las escuchas en bloques (identificación de los implicados, armas, bienes y cuestión enconómica y partícipes) y pasarlas todas juntas. Así, se reprodujeron 300 minutos de audios, casi de corrido. La Fiscalía valoró que con ello "queda confirmada la identidad" de quienes hablan. En tanto, el ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro visitó el edificio para controlar las tareas de seguridad. "Ojalá la banda rinda cuentas por los delitos y homicidios que cometió", dijo antes de irse.

La idea inicial para introducir las escuchas como prueba al juicio era que el suboficial Ariel Lotito, que comenzó a declarar anteayer ‑como uno de los ejes fundamentales de la dirección que tomó la investigación por el crimen de Martín "Fantasma" Paz para derivar en la causa por asociación ilícita‑ hiciera una suerte de interpretación de cada una de las escuchas que dijo haber "controlado" durante la investigación. Sin embargo, ayer estuvo sentado frente al Tribunal, pero no pudo abrir la boca durante horas, hasta que finalizaron las reproducciones. Así, se intentó evitar que las defensas objetaran ante los dichos del testigo, que recién podría hablar al final de los audios.

Tras brindar un testimonio detallado sobre la investigación que coordinó desde la Brigada de Judiciales que trabajó para el juez Juan Carlos Vienna, y advertir que tiene sus propias opiniones sobre los acusados; ayer Lotito solo tuvo que escuchar, durante horas. La audiencia se convirtió en un dictado de números de discos y fechas de las intervenciones en las que muchas conversaciones no llegaban a entenderse.

Con el primer bloque de escuchas, tomadas entre abril y mayo de 2013, la Fiscalía demostró la identificación de los implicados, que ahora están sentados en el banquillo.

Por la mañana, se reveló una diálogo entre el imputado Leandro Vilches y un gestor automotor. Esa persona le preguntaba sus datos para darle titularidad a un auto y él da su nombre completo y número de documento, cuando se le preguntó si quería hacer la tarjeta azul para poder utilizar el vehículo que estaría a nombre de su madre Susana Estela A.. "Ese registro puntual y evidente muestra la pertenencia de cada una de las voces en las escuchas a uno de los imputados de este juicio", expresaron fuentes de la Fiscalía.

En tanto, a partir de otras escuchas se intentó demostrar "la implicancia de los imputados en la asociación ilícita, entre otros delitos" por los que se los acusa. Se prevé la semana próxima dos profesionales del departamento de Acústica Forense, reconocidas a nivel nacional, "puedan dar cuenta de la pericia científica que se realizó de las escuchas", adelantaron fuentes de Fiscalía. Es decir que no solo la interpretación de un policía como testigo será parte de la acreditación de ese material probatorio, que criticó la defensa de los imputados, al entender que no todos los informes estaban firmados por Lotito.

 

Escuchas

Entre las escuchas seleccionadas por la Fiscalía, se reprodujeron las siguientes:

*Matando gente. 31 de mayo de 2013, 00:00:38 (a cuatro días del crimen de Claudio "Pájaro" Cantero y la seguidilla de ataques que dieron muerte a Diego Demarre, Marcelo Alomar, Nahuel y Norma César)

‑-Narigón

‑-¿Dónde estás hermano?"

‑-Acá, de mi hermana

‑-¿Qué estás haciendo hermano, estás durmiendo vos?

‑-Sí guacho, me quedé dormido

‑-Rescatate Gordo, estás re contra mil cómodo, nosotros andamos matando gente por todos lados. Te estamos llamando por una urgencia no podemos contar con vos boludo.

"Rescatate Gordo, estás re contra mil

cómodo, nosotros andamos matando gente

por todos lados", dice un sicario.

 

*Homicidio de Demarre. 27 de mayo de 2013, 12:55.

‑-Amigo

‑-Ey ¿podés hablar?

‑-Decime.

‑-Fijate si te enterás algo, cómo está Demarre. Está en el hospital ya.

‑-¿Ese gil también estaba ahí?

‑-Sí sí, él estaba ahí.

‑-Ahí te averiguo.

 

A las 12.57

‑-Monchi

‑-Decime

‑-¿En qué calle pasó eso?

‑-Maipú y Segui

‑-Dale.

 

A las 13:04

‑-Decime

‑-Está más allá que para otra cosa, siete le dieron

‑-Listo

‑-Está listo prácticamente ehhh. ¿Cómo es? ¿Qué lo llamó o algo ese día?

‑-Sí

‑-¿El lo hizo ir para allá? Que hijo de mil putas ese Tartamudo

‑-Sí, él estaba ahí adentro

‑-Mirá. ¿Qué vos decís que lo entregó che?

‑-Sí

‑-Listo, dale nomás no yo no sabía nada, se hace el oscuro viste...

‑-Dale, después más tarde a la noche si querés nos cruzamos y hablamos

‑-Dale Monchi, quédate tranquilo cualquier cosita me chiflas".

 

*Armas. El tema de las armas quedó plasmado en varias de las escuchas con frases sueltas: "Fijate si me podes conseguir un par de cajas de confites de novillo (balas 9mm), el pibe este de '38' años y el otro de '22'"; "Me dijo Alejandro que le mandes la herramienta que tenes allá y si tenes también la carabina"; "Me estoy yendo al cotillón, a ver qué puedo sacar"; "Fijate si podemos comprar un cargador o dos de nueve".