El precio de los huevos se disparó más
de un 15 por ciento en la última semana y acumula un aumento del 35
por ciento desde diciemrbe, en un proceso de subas donde confluyen
factores externos, como la gripe aviar en los Estados Unidos,
fenómenos climáticos que han complicado la producción local y
cambios en los hábitos de consumo de una proteína “barata” que
ha ido en aumento en los últimos años en la Argentina.
Los productores y comerciantes
coinciden en que el brote de gripe aviar que afecta desde hace
semanas a los Estados Unidos es una de las claves para entender el
incremento de precios a nivel local: por el virus, fueron sacrificadas más de 60
millones de gallinas ponedores, alrededor del 20 por ciento, y se
produjo una suba descomunal en ese país, donde la docena llegó a
costar 15 dólares, y eso causó un desequilibrio del mercado global.
Por el desabastecimiento, buena parte
de la producción de países como Canadá, México y Brasil - que antes
abastecían a la Argentina - se está volcando a los Estados Unidos.
“Argentina el año pasado importaba huevos de Brasil porque no
alcanzaba para cubrir la demanda interna. Hoy todo lo que exporta
Brasil se lo manda a Estados Unidos, entonces hoy no alcanzan los
huevos que se producen acá”, explicó Juan Pablo Della
Villa, integrante de la cooperativa alimenticia ECAS, en diálogo con
la AM 750.
Cuánto cuestan los huevos
El cajón mayorista de 360 huevos que
Della Villa pagaba 47 mil pesos en diciembre, a finales de marzo lo
paga entre 63 y 64 mil pesos. “Aumentó un 35 por ciento y es un
artículo de consumo masivo, básico en la dieta de todas las
familias”, argumentó el comerciante, que afirmó que la Argentina
podría aprovechar el desabastecimiento de los Estados Unidos y
reclamó políticas para darle impulso a la producción y
exportación. “Podría ser una oportunidad y termina siendo un
momento inoportuno”, dijo con resignación.
El maple de huevos que a finales de 2024 se conseguía a entre 5.000 y 6.000 pesos, hoy no baja de los 7.500 en las verdulerías, aunque en los supermercados está aún un poco más y puede trepar hasta los 9.300.
En su comercio cooperativo
de Villa Crespo, Della Villa los vendía en diciembre a 4.800 y ahora
a 6.330. “La inflación del huevo fue de más del 30 % en tres
meses, y más del 15 en siete días, el impacto fue tremendo y
vertiginoso”, se quejó.
Sin embargo, también influye la calidad y el tamaño. El maple de 30 huevos pastoriles cotiza mucho más, alrededor de $12.000. En otros comercios, otras variedades se consiguen a $10.000.
Las gallinas, entre las retenciones y la ola de calor
El otro factor que influyó en la suba
del precio de los huevos fue la quita de las retenciones a la soja y
el maíz anunciada en enero pasado, que repercutió en el mercado interno. “Lo pagamos los
consumidores en el valor final del huevo y los productores, que pagan
más por la soja y el maíz y con los incrementos del alimento
balanceado para las gallinas, nada es gratis”, dijo Della Villa.
Las condiciones climáticas también tienen su grado de influencia, ya que por las olas de calor y las altas temperaturas que registra la zona de mayor producción de huevos durante enero y febrero afectan a las gallinas ponedores.
Por qué aumento el consumo de huevo
Todo esto ocurre en un escenario de suba del consumo de huevos per
cápita registrado en el último año, en especial por tratarse de
una proteína “barata” en comparación con la carne vacuna, que
por los aumentos del último año se ha vuelto imposible para muchas
familias.
De hecho, es cada vez más frecuente la
instalación de comercios dedicados exclusivamente a la venta de
huevos en los grandes centros urbanos, que lo ofrecen en múltiples
variedades y presentaciones. De acuerdo con los registros oficiales
de la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA), los
argentinos pasaron de consumir 127 huevos al año en 2002 a 352 en
2024.
Mientras tanto, en la CAPIA hubo gran
preocupación, meses atrás, por el crecimiento del contrabando de
huevos en la Argentina, en especial en el norte y el nordeste, en
zonas cercanas a las fronteras. En diciembre, los empresarios
pidieron al Gobierno que refuerce los controles y decomise la
mercadería que circula en la informalidad, por tratarse no sólo de
una amenaza para una actividad económica fundamental, sino también
por el riesgo que supone para la salud pública.