Un día antes de morir, Francisco volvió a enfrentar a la Internacional Reaccionaria en su mensaje Urbi et Orbi del domingo 20 de abril: “Cuánta voluntad de muerte vemos cada día, en los numerosos conflictos que afectan a diferentes partes del mundo. Cuánta violencia percibimos a menudo también en las familias, contra las mujeres o los niños. Cuánto desprecio se tiene a veces hacia los más débiles, los margina