Desde su lanzamiento en Netflix, El Eternauta ha capturado la atención de audiencias globales, superando expectativas y estableciendo nuevos referentes para las producciones argentinas de ciencia ficción. Con presencia como líder de audiencia en 27 países y segundo lugar a nivel mundial, esta adaptación representa un hito tanto para el cómic original de H.G. Oesterheld y Francisco Solano López como para la industria audiovisual del país.

El fenómeno global de El Eternauta

Dirigida por Bruno Stagnaro y protagonizada por Ricardo Darín, la serie se ha convertido en un éxito que trasciende barreras culturales y lingüísticas. Grabada completamente en Buenos Aires, la producción destaca por su impacto visual, logrado con tecnología de vanguardia y una narrativa sólida. Stagnaro, quien también coescribió el guion, incorporó una perspectiva contemporánea a una trama con raíces en la literatura clásica. La historia sigue a Juan Salvo y un grupo de amigos mientras enfrentan una invasión alienígena en una Buenos Aires cubierta por nieve mortal.

Influencia económica y cultural de la serie

El éxito de El Eternauta ha impulsado la industria local, generando empleos y revitalizando el sector audiovisual argentino. Además, ha aumentado el interés internacional por producciones nacionales, elevando las expectativas de críticos y espectadores. Con un 96% de aprobación en Rotten Tomatoes, la serie ha sido alabada por su ambición, calidad narrativa y atención al detalle. 

Una adaptación que redefine estándares

El salto del cómic a la pantalla se realizó con precisión, destacando efectos especiales innovadores y un elenco que profundiza en las emociones de los personajes. Filmada en más de 35 locaciones y con 25 escenarios creados mediante producción virtual, la serie marca un avance tecnológico y creativo. La participación de Ricardo Darín ha sido fundamental para atraer mirada internacional, renovando el interés por la obra original y su legado.