El Rey de Copas volvió al país con su más reciente trofeo, la Copa Sudamericana. Pasado el mediodía, el plantel de Independiente aterrizó en el Aeroparque, donde lo esperaban miles de aficionados. Todos los jugadores y el cuerpo técnico encabezado por Ariel Holan se subieron a un micro descapotable ploteado con el rojo tradicional de la camiseta del club y encabezaron una nutrida caravana. Estaba previsto que pasaron por el Obelisco, pero las manifestaciones contra la reforma jubilatoria y la represión desatada por las fuerzas de seguridad en la zona de Congreso hizo que se dejara de lado esa idea y se dirigieran directamente al estadio Libertadores de América, en Avellaneda.

Exhibiendo la Copa ganada en el mítico Maracaná tras el empate 1-1 ante Flamengo y al grito de “Dale campeón, dale campeón”, los jugadores recorrieron un trayecto de quince kilómetros acompañados por decenas de automóviles con simpatizantes que no paraban de hacer flamear banderas con los colores del Rojo mientras registraban las imágenes con sus teléfonos. 

El clima de fiesta ni siquiera se interrumpió cuando la delegación debió cambiar de micro por un problema mecánico. Un directivo intentó arreglar el desperfecto pero no pudo y los protagonistas debieron esperar la llegada de otro micro para ir al estadio.

Ya en la zona sur bonaerense, el plantel ingresó al estadio que tenía dos de las cabeceras repletas de hinchas para saludar a los campeones. Casi tres horas después del arribo, el plantel, encabezado por el capitán Nicolás Tagliafico, junto al cuerpo técnico, médico, dirigentes y allegados, saltó al campo de juego y realizó el saludo histórico que reeditó el equipo por pedido de Holan.

Los campeones de la Copa Sudamericana exhibieron el trofeo y la hinchada  deliró. Después, el cuerpo técnico y los jugadores dieron la vuelta olímpica junto a sus familiares.

Los hinchas también aprovecharon para pedirle a Ezequiel Barco que no se vaya, pero el propio futbolista no pudo evitar sincerarse y confesar que su futuro futbolístico seguramente estará en Estados Unidos. Minutos antes, Hugo Moyano, presidente de Independiente, había hablado sobre la continuidad del juvenil. “No depende solo de nosotros. Barco va a ganar un dinero que el club no le puede pagar, (pero) vamos a hacer el esfuerzo para que siga”, afirmó. El líder del Sindicato de Camioneros también prometió que harán los esfuerzos necesarios para que Holan siga siendo el técnico. “Me tengo que reunir con Holan. Estoy convencido de que se va a quedar. Vamos a darle todas las garantías. Queremos que él y su familia vivan tranquilos”, dijo Moyano.