La unión hace la fuerza. La frase, a veces, no es un lugar común. En este caso, La Tabaré, Cuatro Pesos de Propina, Milongas Extremas, Papina de Palma y Juan Mariño cruzarán el charco y unirán fuerzas este sábado 24 de mayo en el Festival Uruguay Nomá en Niceto Club (Niceto Vega 5510). “Es una propuesta muy linda, no solo desde lo estético, sino también desde el mensaje que se da. En este caso nos junta la nacionalidad, pero lo importante es eso, que las bandas nos juntemos”, resalta Gastón Puentes, cantante de Cuatro Pesos de Propina. “Tenemos muchas ganas de volver a Buenos Aires y compartir con tantas bandas amigas con las que hace tiempo venimos compartiendo noches y canciones. Seguramente cantaremos algo entre todos”, refuerza, por su parte, Matías Rodríguez, cantante y guitarrista de Milongas Extremas.

El festival, que se realizará a partir de las 18.30, reunirá por primera vez en un escenario argentino a cinco proyectos musicales con peso propio de la escena montevideana. Desde el largo recorrido (¡40 años!) de La Tabaré dentro del rock uruguayo hasta la emergencia y juventud del cantautor Juan Mariño y la ascendente cancionista Papina de Palma. Desde la potencia guitarrística y el pulso tanguero de Milongas Extremas hasta la luminosidad, simpleza y carácter bailable de Cuatro Pesos de Propina. “Como banda siempre tuvimos el factor común de la temática humana, en nuestro discurso, en nuestra forma de vincularnos en la sociedad y en nuestro centro. Creo que eso es el factor clave que hace que la gente conecte con Cuatro Pesos”, resalta Puentes sobre el espíritu del grupo.

“Nuestra propuesta siempre se caracterizó por la descarga emocional en el escenario. Si bien a primera vista es un quinteto de cuatro guitarras y un bajo, el sonido presenta una actitud rockera que desencaja”, define Rodríguez, vocalista de Milongas Extremas. “En cuanto a la composición y la interpretación somos un eslabón más en la cadena de la milonga y algún otro nos pone en la cadena de bandas. Hace ya varios años que venimos compartiendo la vida y el camino, nutridos del rock y del folklore”, completa el músico. “La palabra que mejor me define es fusión. Más allá que vengo desde chico de un área más rockera, actualmente incursiono en el candombe, el folk, el samba y ritmos latinos”, señala Juan Mariño, autor del disco La rebelión de los picaflores (2022). “Fusionar estilos siempre fue algo que me gustó, con el fin de encontrar nuevas ideas cuando los estilos se tocan”, dice.

Milongas Extremas.


-¿Creen que la música uruguaya en los últimos veinte años pisa más fuerte en Argentina –con el boom de NTVG, La Vela Puerca, El Cuarteto de Nos y Jorge Drexler, y la reivindicación de figuras como Mateo, El Príncipe y Fernando Cabrera- o siempre hubo un intercambio constante, ininterrumpido y fluido?

Mariño: -Creo que el aporte de los medios masivos de comunicación y las conexiones posibles entre países gracias a las nuevas tecnologías hace más evidente este vínculo de la música uruguaya en Argentina. Formar parte de esta nueva ola de artistas que cruzan el charco con su música es realmente un honor. Pero soy consciente que la conexión e influencia mutua data de hace muchas generaciones.

Puentes: -Siempre hubo intercambio, que es algo fluido, pero que también tiene sus olas, sus momentos. Quizás ahora mismo está siendo al revés: las bandas de Argentina están pisando fuerte acá. Pero sí hay algo que es constante y es la buena onda, el intercambio y la química que se da entre el público argentino y las bandas uruguayas.

Rodríguez: -La música uruguaya viene cruzando el charco desde los años sesenta. Desde Los Shakers y Rada, pasando por Jaime, entre otros. La Vela y NTVG forjaron un gran puente para que propuestas nuevas también puedan ir a mostrar lo suyo en Argentina. El fenómeno de la murga uruguaya también fortaleció ese puente. Hoy las redes acercan aún más la música a la gente y nosotros tenemos suerte de poder cruzar ese puente y colaborar en que se sostenga.

-¿Y cómo es el diálogo de su música con el público argentino? ¿Hay muchos códigos en común, verdad?

Puentes: -Hay un rio de códigos en común. Toda una historia. Claramente cada cual tiene sus idiosincrasias, pero el diálogo, la conexión, los códigos compartidos es algo que abunda y que excede a las bandas. La cultura de rock rioplatense es algo muy rico.

Rodríguez: -Aunque suene a cliché, el público argentino es lo más. La gente es muy expresiva y nos acompañan desde las primeras idas a Buenos Aires. Se fue construyendo una comunión en cada show que nos gratifica siempre. Cada vez que vamos nos traemos nuevas amistades.

Mariño: -Mi vínculo con la música argentina empieza con los grandes clásicos del rock que supieron cruzar el Río de la Plata. Artistas como Viejas Locas, Soda Stereo, Los Redondos marcaron mi influencia rioplatense. Luego vino la nueva ola indie rock que es actualmente una de mis influencias principales. Desde lo nuevo que aporta al rock Eruca Sativa hasta bandas como Conociendo Rusia, Bandalos Chinos o El Zar.