La Sirenita fue primero un cuento de hadas escrito por el danés Hans Christian Andersen. Más tarde esa historia se convirtió en la icónica película de animación de 1989 producida por Disney con dirección de Ron Clements y John Musker (en 2023 tuvo su versión live action), y luego se adaptó para las tablas: el musical de Broadway se estrenó el 10 de enero de 2008 en el Teatro Lunt-Fontanne, con libro de Doug Wright, música de Alan Menken y letras de Howard Ashman y Glenn Slater. En Argentina acaba de estrenarse una versión de 90 minutos dirigida por Ariel Del Mastro: una experiencia inmersiva de altísima calidad artística.
Ya desde la primera escena, el Gran Rex se llena de música y burbujas que llevan al público directo a las profundidades del océano, donde transcurre la acción. La historia es muy conocida y la euforia en la sala –sobre todo por parte de lxs millennials– da cuenta de la influencia que tuvo este film en la generación nacida durante los años 90. Ariel (Albana Fuentes) vive bajo el mar junto a sus hermanas, su padre Tritón (Osvaldo Laport) y sus amigos acuáticos, Sebastián (José María Listorti) y Flounder (Valentín Zaninelli); ella está fascinada con los humanos y anhela salir a la superficie. Cuando el barco del príncipe Eric (Pablo Turturiello) naufraga, ella lo rescata, se enamora perdidamente y decide hacer un trato con su malvada tía Úrsula (Evelyn Botto), desterrada por Tritón, para cambiar su increíble voz por un par de piernas.
La producción que llega al país de la mano de Ozono, MP y Los Rottemberg es ambiciosa y se erige hoy como una de las grandes producciones en la cartelera porteña, no sólo por su nivel técnico sino también por la armonía en cada rubro artístico y la fidelidad al original. Con arneses de los que cuelgan varios personajes (diseño y coaching de vuelos a cargo de Santiago Castello y Germán Cabanas), una buena cantidad de burbujas y magníficas visuales que reproducen el fondo marino, un mar embravecido o la quietud de un lago espejado con la misma eficacia (a cargo de Maxi Vecco), el público podrá sumergirse en este relato que cuenta, además, con una increíble escenografía diseñada por Jorge Ferrari, coloridos vestuarios que retratan la diversidad de la fauna marina creados por Romina Lanzillotta junto a Catalina Rodríguez Loredo, y coreografías de Analía González (el cuadro de tap de las gaviotas liderado por Scuttle –Nahuel Adhami– es notable).
El elenco está a la altura de las expectativas: Fuentes y Turturiello brillan y se lucen sobre todo en los aspectos vocales (sus voces son las más cristalinas, algo que está en consonancia con sus personajes; Fuentes tiene encanto para componer a su Ariel y además se enfrenta al desafío de caminar ondeando su cintura casi toda la función para que sea creíble su estado de flotación); pese a tener un gran caudal vocal y buenos matices que pueden apreciarse en Mi primo es así o en los Days de Olga, Botto apuesta mucho más a lo histriónico porque es lo que demandan las canciones de su villana con aura drag y le imprime espesura a través de la actuación.
Laport cumple como Tritón con apariciones que son más sobrias que el resto porque, después de todo, se enfrenta a los dramas de una hija adolescente con un amor interespecie imposible, pero le aporta cierta ternura que lo saca del lugar de deidad enfurecida; Listorti y Zaninelli tienen la función de bufones. El ex Videomatch sorprende con su habitual comicidad, un acento cubano que remite al original (no podía faltar) y una performance vocal más que digna en su rol de narrador cómplice. Además, su cangrejo protagoniza uno de los hitazos musicales: la inolvidable "Bajo el mar" con la que baila y canta todo el Rex.
Había grandes expectativas con La Sirenita y esta creación colectiva cumple con creces para demostrar una vez más que el talento de los artistas argentinos es una realidad muy concreta y puede aceptar los desafíos de recrear una producción icónica con extensa trayectoria en el teatro musical. Una gran opción para chicos y grandes (sobre todo si se criaron a base de Disney en los '90).
La Sirenita: 8
Dirección: Ariel Del Mastro
Co-dirección y puesta en escena: Marcelo Caballero
Intérpretes: Albana Fuentes, Osvaldo Laport, Evelyn Botto, José María Listorti, Pablo Turturiello, Valentín Zaninelli y elenco.
Lugar: Teatro Gran Rex