En la primera experiencia de juicio por jurados en Santa Fe, condenaron al productor agropecuario Rubén Ulrich, quien en enero de 2023 mató de un escopetazo al comisario Franco López –amante de su esposa, de la que se hallaba distanciado– en la localidad de Monigotes, a 340 kilómetros de Rosario. El jurado popular consideró que Ulrich actuó bajo emoción violenta, lo que representó un revés para la Fiscalía, que había solicitado prisión perpetua por "femicidio vinculado". En la audiencia posterior al veredicto, el juez penal Nicolás Stegmayer impuso una pena de cuatro años de prisión efectiva. Nadie quedó conforme.