Las tres patas que conforman la comunidad educativa de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) -el rectorado, los docentes, no docentes y el alumnado- convocaron ayer en forma conjunta a través de una rueda de prensa a la movilización de este jueves en la plaza Montenegro, en defensa de la educación superior y por más presupuesto y mejores salarios, que tendrá una actividad previa desde la mañana en la plaza Pringles. Además, lanzaron la campaña con el propósito de “juntar un millón de firmas” que puedan sensibilizar al Gobierno de Javier Milei acerca de la importancia que tiene para un país brindar un servicio de educación superior gratuito y de calidad. Tarea de dimensión titánica a la luz del veto que el presidente firmó el año pasado cuando el Congreso aprobó una módica ayuda a las universidades.

El Congreso, sin embargo, vuelve a ser la institución de la república elegida por la comunidad universitaria para conseguir lo que el Poder Ejecutivo deniega en forma más o menos sistemática: más recursos para la educación superior. “Estamos atravesando una situación más delicada que la del año pasado, frente a eso presentamos con mucha responsabilidad desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) un proyecto de financiamiento universitario en el Congreso de la Nación”, dijo el rector de la UNR, Franco Bartolacci.

“Esperamos que eso pueda tener rápido tratamiento para poder resolver esos problemas presupuestarios, y sobre todo salariales, que son los más angustiantes. Realmente la situación del personal docente y no docente de las universidades públicas es muy crítica y muy precaria, el 80 por ciento percibe un salario por debajo de la línea de la pobreza, con situaciones realmente muy complejas”, abundó la principal autoridad de la casa de estudios públicas de Rosario.

La conversión de los profesores y profesoras en parias del mercado laboral tuvo como efecto el abandono de esa actividad en porcentajes significativos. “Aproximadamente el 5 por ciento del personal docente de todo el sistema universitario renunció el año pasado por esa situación salarial, unos 8 mil en todo el país, una tendencia que nos preocupa porque triplica datos de años anteriores y claramente es consecuencia de eso que está pasando”, remarcó Bartolacci durante la rueda de prensa en la sede de la Coad, el gremio de los docentes.

Pasar el invierno

“Para eso convocamos para este jueves 26 en todo el país a una manifestación federal, pidiendo por un lado a la sociedad argentina que nos acompañe con su firma para el proyecto de ley de financiamiento universitario, porque queremos juntar un millón de firmas para llevar al Congreso de la Nación”, señaló el rector de la UNR.

En esa línea, dijo que “por otra parte, pedirles a los legisladores nacionales, en este caso a los diputados de Santa Fe, que den quorum el 2 de julio, que está prevista una sesión especial de Diputados que tiene como prioridad poder emplazar a la comisión de Hacienda y de Educación para que traten este proyecto, den dictamen y poder tener ley aprobada en el mes de agosto”. Según Bartolacci, de no contar con esos recursos, “vamos a tener muchos problemas para poder funcionar con normalidad en el segundo semestre”.

Federico Gayoso, secretario general de Coad, señaló que la movilización del jueves en todo el país tiene por objetivo abordar “la situación salarial, y porque nos interesa que siga existiendo el sistema universitario tal como lo conocemos. Lo primero es que no desaparezca: hoy está en riesgo el sistema universitario”.

En términos porcentuales, el dirigente sindical precisó que desde la asunción de Milei al frente de la Casa Rosada “hemos perdido un tercio del salario”. Por si no se entiende, lo explicó “en términos coloquiales: si antes llenábamos tres changuitos del súper, hoy llenamos dos”. Matemática aplicada.

Para Gayoso, “esto lleva a que muchos compañeros y compañeras estén renunciando. Estamos asistiendo a un verdadero vaciamiento de la universidad y eso no lo podemos permitir”. También emplazó a las y los diputados nacionales por Santa Fe para que den su voto a la ley de financiamiento universitario impulsada por los rectores del CIN.

“La mayoría de los legisladores asistieron a la universidad pública, tienen que levantar la cabeza de su propio ombligo y pensar que las posibilidades que tuvieron ellos las tengan las generaciones futuras. Todos tenemos hijos, hijas, nietos, que queremos que vayan a la universidad si lo desean”, afirmó el titular de la Coad, cuyos afiliados también padecen la precarización de la atención de salud por los bajos salarios que se convierten en ridículos aportes al sistema de obras sociales.

Por último, se autoimpuso como meta que “esta generación de docentes, no docentes y estudiantes, no podemos ser los que permitan que se desguace la universidad, y tenemos la responsabilidad de dejarles a las generaciones futuras una universidad al menos como la que tuvimos nosotros”.

Una marcha de todos

Por la pata estudiantil de la UNR, la presidenta de la Federación Universitario local (FUR), Delfina Rosso Sasia, recordó que el 20 de junio el alumnado inicio la campaña de recolección de firmas durante los actos oficiales por el Día de la Bandera, en el monumento nacional que la evoca, a orillas del río Paraná.

“Queremos invitar a la actividad del jueves a las 10 de mañana en la plaza Pringles –dijo la dirigente estudiantil-, y después a la movilización a las 14 con un acto que cierra a las 15 en plaza Montenegro”, ubicada en San Luis y San Martín.

 

“Si llegamos hasta acá y seguimos como estudiantes es por el acompañamiento de la sociedad en general que se ha notado mucho el año pasado, y también este año”, añadió la presidenta de la FUR, en referencia a la multitudinaria movilización del 2 de octubre del año pasado, que derivó en la aprobación en el Congreso de la ayuda económica a las universidades que luego el presidente vetó. Rosso Sasia subrayó que  es necesario el acompañamiento social para “poder seguir esta lucha en conjunto con todos, porque es imposible que sea solo dentro de la universidad”.