El gobernador Maximiliano Pullaro volvió al centro de la escena pública con una presentación en la temática que mejor le sienta, luego de una elección en la que el frente Unidos para Cambiar Santa Fe no logró ratificar su hegemonía de 2023 en las principales ciudades. Pero ayer, con la temperatura en 0, hizo pararse a todo el funcionariado sobre la helada mañana en la sede de la Policía de Investigaciones, para presentar un despliegue de uniformes, armas sofisticadas y tecnología: entró en escena la Unidad de Capturas de Alto Perfil, una célula de policías y agentes penitenciarios creada para rastrear y apresar a personas fugitivas de renombre en el crimen organizado de la provincia. "Vamos a ir a cada cueva, barrio o casa donde estén escondidos", prometió de nuevo en el tono habitual que impone en materia de seguridad pública.

Pullaro dio a conocer cifras que indican una disminución del delito común en el departamento Rosario. Según dijo, el mes de junio fue el que menos denuncias de robos registró la jurisdicción desde que existen aquí mediciones sobre tal fenómeno, en los últimos diez años. "Hubo 1.800 robos en todo el mes. Cuando comenzó nuestra gestión teníamos 8.000 robos mensuales en esta ciudad. El descenso ha sido abrupto, gracias al trabajo que llevó adelante nuestra policía de prevención. En todo el país y en muchos lugares de América Latina miran la experiencia de Santa Fe", se ufanó.

En esa línea recalcó lo que considera su mejor activo de gestión, la disminución de los índices delictivos. "Nos enorgullece que nos miren como ejemplo, pero si creemos que ya le ganamos al crimen organizado, nos equivocamos", aceptó. Rosario, no obstante, todavía suma a esta altura del año 70 asesinatos.

"Cuando comenzó nuestra gestión –continuó–, Rosario estaba sitiada por la violencia y por el delito, y parecía prácticamente un sueño que pudiésemos lograr los indicadores que en este momento se han logrado en la provincia. Hubo que poner el cuchillo hasta el hueso y se trabajó de manera coordinada y estratégica para poder frenar la violencia y el delito en la provincia de Santa Fe, particularmente en la ciudad de Rosario. La violencia cayó en términos absolutos", enfatizó.

El mandatario remarcó que la estadística hoy pone a Santa Fe por debajo del promedio nacional en cuanto a tasas de delito. 

Mientras las autoridades de Seguridad, de Policía, del Poder Legislativo y Judicial tiritaban y exhalaban vapor en la mañana glacial, el jefe del Ejecutivo presentó a los pertrechos de este "cuerpo especializado" que tendrá por misión localizar y detener a prófugos considerados de alto peligro, en especial, traficantes de droga y pistoleros que ejecutan la gestión violenta del crimen en Rosario.

Fuentes del Ministerio de Seguridad explicaron que la unidad nueva funciona dentro de lo que llaman "Bloque Interagencial de Capturas", un espacio donde cooperan el Servicio Penitenciario, Policía de Santa Fe, organismos de inteligencia y el Ministerio Público de la Acusación (MPA). La tarea de estos hombres y mujeres será "ejecutar operaciones de inteligencia criminal, patrullaje cibernético y despliegue táctico para capturar a los delincuentes más buscados, y contará con equipamiento de última tecnología", aseguró un técnico del ministerio.

“Cuando parece que logramos un objetivo, corremos la raya y vamos por más. No nos conformamos –se entusiasmó Pullaro–. Vamos a buscar a quienes tienen pedido de captura, sobre todo a los que pueden cometer delitos violentos", dijo. "Si creen que con 10 ó 20 mil dólares pueden comprar protección, el Estado va a ofrecer diez veces más en recompensas para atraparlos. No vamos a escatimar recursos”, agregó.

El ministro del área, Pablo Cococcioni, anticipó que en estos días su cartera difundirá la lista de las 10 personas más buscadas de la provincia, con su correspondiente recompensa ofrecida para cada caso, destinada a quienes aporten información para capturarlas. De ese sistema –puntualizó el ministro– surgió el dato menester para encontrar y apresar en Bolivia a Damián Reifenstuel, prófugo por el asesinato de Ivana Garcilazo, en setiembre de 2023, al término de un clásico entre Central y Newell's.

Este cuerpo especial deberá reunir información de las distintas agencias que lo integran, pero en coordinación con Fiscalía o autoridad judicial. Sin embargo, dependerá en lo operativo de la Policía de Investigaciones. 

En la exposición se mostraron drones equipados con cámaras infrarrojas, herramientas de monitoreo digital, instructivos para el patrullaje en redes sociales y análisis de información en tiempo real. Además, se incorporaron los Kit Roni, unos adaptadores que convierten pistolas en armas largas, que el Gobierno compró facultado por la Ley de Emergencia en Seguridad.

"El crimen organizado también innova, por eso el Estado tiene que estar a la altura, anticiparse y actuar con decisión", justificó Cococcioni.