La economía argentina acumula cada vez más tensiones en el frente externo. La semana pasada el Fondo Monetario Internacional celebró el ajuste sobre las cuentas fiscales y monetarias, pero dejó en claro que las reservas internacionales son el gran talón de Aquiles. El gobierno no logra bajar el riesgo país, que se mantiene cerca de los 800 puntos, mientras que las presiones cambiarias van en aumen