Caren Tepp tiene 38 años, es feminista y encabeza la lista de Fuerza Patria en Santa Fe para la Cámara de Diputados. Es dirigente de Ciudad Futura, la propuesta que nació desde el barrio Nuevo Alberdi en Rosario, que en los últimos años tejió alianzas con sectores del justicialismo. Así llegó su candidatura que, para quienes la impulsaron, encarna la renovación necesaria para disputar la elección.
“En esta etapa, a mí más que la idea de resistir y volver, que es propia de un momento histórico, me gusta más pensar que la tarea de todo nuestro campo es cuidar la vida y construir lo nuevo. De alguna manera, la candidatura que hoy me toca encabezar sintetiza o busca eso”, expresa Tepp.
Unidad y renovación política
La dirigente entiende que “la vida está siendo atacada en todas sus formas por estos gobiernos autoritarios y en particular por la motosierra de Milei”. Y recuerda que fue el movimiento feminista el que politizó el cuidado de la vida.
En ese marco, en Fuerza Patria confluyen el Partido Justicialista, Ciudad Futura y otra decena de partidos. “Para nosotros es muy importante lo que se logró en la provincia de Santa Fe en términos de la unidad de quienes venimos defendiendo los mismos derechos y bregando por las mismas causas justas".
Consideró que era la hora de terminar con la fragmentación "porque eso es ser absolutamente funcionales a los gobiernos autoritarios, no solamente de Milei, sino también a las réplicas que tienen en los gobiernos provinciales y locales”, considera.
Se trata también de hacer otra oferta. “La unidad era central. Pero tenía que estar acompañada de un proceso de renovación política, que es la otra demanda de la sociedad. Ese proceso ya lo habíamos iniciado en Santa Fe este año, donde además de las elecciones locales hubo elecciones de convencionales constituyentes”.
Juan Monteverde encabezó la lista de unidad en abril, para la reforma de la Constitución provincial, y salió segundo en toda la provincia el 13 de abril. El 29 de junio ganó la elección para concejales en Rosario.
“Que en esa renovación además tengamos el plus de que sea una mujer feminista la que encabece la lista, me parece que es un hecho político histórico que asumo con mucha responsabilidad”, afirma Tepp.
Una sociedad mejor
La candidata considera que su postulación demuestra que las feministas están “lejos de ser piantavotos”. Y amplía: “Por el contrario, tenemos en nuestras manos y en la actividad de todo el movimiento no solamente oponer resistencia a este modelo, sino fundamentalmente alumbrar la alternativa para los próximos años”.
La mirada feminista estructura su evaluación política. “No solamente se trata de la necesidad de mejorar las condiciones materiales de vida, sino también de que este modelo que ofrece Milei quiere imponer que la vulnerabilidad es una debilidad. Y que un cuerpo vulnerable debe ser atacado".
Para Tepp, ese modelo se opone a “la experiencia" de las prácticas feministas, de muchos movimientos sociales y populares en Argentina. "Justamente, pasa por lo contrario: por reconocernos cuerpos vulnerables, en la necesidad de la interdependencia. Desde allí reconstruir una idea de comunidad que nos permita resolver los problemas que tenemos, las deudas que tiene la democracia con las amplias mayorías de nuestro pueblo, y también construir una sociedad mejor, incorporando una nueva cultura política”.
Modelo contra la vida
Actualmente concejala de Rosario, Tepp tendrá como oponentes a Gisela Scaglia —vicegobernadora de Maximiliano Pullaro, militante del PRO que defendió a Javier Milei hasta dos minutos antes de la campaña— y al ignoto Agustín Pellegrini, de La Libertad Avanza.
“El modelo de desregulación total del mercado de Milei ataca la posibilidad de la vida digna de nuestro pueblo en cuestiones que tienen que ver con lo más básico. Hoy vemos cómo mes a mes no solamente los sectores populares, sino también los sectores medios, se van endeudando con la tarjeta de crédito, con lo que tengan a mano, para poder solventar lo mínimo indispensable”, describe.
Como feminista, advierte que este escenario afecta especialmente a mujeres y cuerpos feminizados. “Atenta claramente contra nuestra autonomía económica y somos de las principales víctimas, por el deterioro de las condiciones materiales y también por la decisión del gobierno de Milei de convertir a todos aquellos que no somos los cuerpos hegemónicos de la sociedad patriarcal en los principales blancos, para atacar también desde lo simbólico”.
De la denuncia a las propuestas
Pero Ciudad Futura —hoy dentro de Fuerza Patria— no se queda en la denuncia. Lo que proponen es “no solamente impugnar lo que está mal en este sistema, sino también pensar y ofrecer alternativas a eso, en cuestiones claves como los alimentos y la vivienda”.
La Empresa Pública de Alimentos y la urbanización de 170 hectáreas de Nuevo Alberdi, a partir de siete obras del Fondo para la Integración Socio Urbana (FISU), son dos de sus realizaciones concretas.
A contrapelo de ciertos discursos peronistas que culpan a los feminismos por la derrota electoral, la candidatura de Tepp reivindica una tradición política. Ciudad Futura nació como el movimiento social Giros, en el barrio Nuevo Alberdi, en el noroeste de Rosario, a partir de tierras codiciadas por emprendimientos inmobiliarios pero defendidas para sus pobladores. Caren y Monteverde, en pareja hace más de una década, vivieron dos años en ese barrio.
Lo que busca es “llevar e impulsar en el Congreso de la Nación las experiencias de Ciudad Futura de materialización y de respuesta a estos problemas concretos, pero fundamentalmente también la capacidad que tiene el movimiento feminista de politizar esa agenda de los cuidados y de la vida cotidiana”.
La alternativa de futuro
Por eso, nada más lejos de Caren Tepp que disimular su feminismo. “No voy a ocultar mi militancia en los movimientos populares que me forjaron después de la crisis del 2001, la militancia territorial, como así tampoco la del movimiento feminista. Porque creo que también con el movimiento ambientalista y con todos los colectivos que están organizándose como víctimas directas de este modelo de Milei, es donde están las mayores claves para construir una alternativa de futuro”.
Y considera necesario construirla. “No creemos que la sociedad argentina se fue a dormir creyendo en la justicia social o en la solidaridad, en la igualdad, y se levantó anarcocapitalista e individualista. En realidad estamos viviendo un nuevo momento de profundización de una crisis de representación política, no solamente de Argentina, sino también del mundo”, explica Tepp.
Lo cierto es que Milei no hubiera ganado si solo votaran las mujeres. “Ese es un dato de la realidad: el voto de las mujeres, además de los distintos colectivos de la diversidad y demás, fue un voto contra Milei”, dice.
Y refuerza: “Vienen siendo el movimiento feminista y de las diversidades los sujetos políticos más activos en contra de los gobiernos de ultraderecha y autoritarios en todo el mundo".
Para lograr que esas alternativas vuelvan a expresar al conjunto, considera que la clave está en “que surjan nuevas expresiones, para volver a conectar la política con la vida cotidiana, que se vuelva a poner en el centro de la discusión y del debate político lo que nos pasa y cómo vivimos todos los días las grandes mayorías”.
Un poder con historia
En 2017, Caren Tepp encabezó una lista de diputadas que se llamaba "El poder de las mujeres", y consideró -entonces- que era una apuesta para “abrir y profundizar el debate de cómo se construye una sociedad más participativa, que reivindique el rol de la mujer”.
Hoy recuerda que aquella propuesta surgida de una asamblea de Ciudad Futura se dio en "un momento donde se empezaba a abrir y a acelerar nuestro proceso de lucha feminista en la agenda y en la sociedad".
Entonces, se la impugnó por la falta de varones, pero ahora Tepp considera que entonces "quizás era vista como solamente la defensa sectorial de nuestra agenda". Y ocho años después, "con todo lo que pasó en el medio", apuesta a que su candidatura sea "la clara expresión de que el proyecto feminista no se trata solamente de que nosotras vivamos en libertad y en igualdad, sino que realmente sea para la sociedad en su conjunto".
El cuidado es político
Tepp es madre de Lucas, nacido en octubre de 2024, un bebé sonriente y paciente con las actividades políticas. Cuando sea diputada nacional, se pondrá a prueba la construcción feminista de su pareja con Monteverde.
"El compañero va a tener que hacer realidad y materializar que vamos a compartir esas tareas de cuidado, para que yo pueda estar abocándome ahora a esta tarea", dice, pero prefiere sacar el tema de su experiencia personal.
Minimiza, sin embargo, que ese sea un problema en su vida. "No es complejo, cuando en realidad sé, conozco y lucho por cambiar la realidad de muchas mujeres", dice sobre las desigualdades estructurales que constata cada día.
Y enumera: "mujeres que están en situaciones monoparentales, de llevar adelante una familia, que siguen peleando por la cuota alimentaria, que en los contextos de violencia tienen que estar demostrando que nuestras denuncias no son falsas, que vienen teniendo cada vez más pluriempleo y más tareas de cuidado sobre sus cuerpos, donde va creciendo sobre todo sobre el cuerpo de las mujeres, los trabajos no remunerados y el endeudamiento de cada vez más familias, que recae fundamentalmente sobre nosotras".
El anhelo de una niña
Tepp viene de una familia de militancia radical en la ciudad de Santo Tomé, pegada a Santa Fe, donde en 1994 se modificó la Constitución Nacional. Entonces, recién se aplicaba el cupo femenino, y hubo mujeres protagonistas de la Convención, como Elisa Carrió y Cristina Fernández de Kirchner. En una familia muy politizada, Caren vio la posibilidad de entrar a ese mundo. Tenía nueve años cuando dijo que quería ser diputada nacional.
Su papá, Carlos Tepp, fue concejal radical. Murió en 2015, sin llegar a verla concejala. Aunque sí asistió al nacimiento de Ciudad Futura.
Después de la definición de la candidatura, su mamá, Liliana Nessier, la esperó con un portarretrato en el que puso la foto de aquella niña y un cartel que decía que su papá, donde esté, se siente orgulloso y feliz por su hija. “A mi viejo y a mi vieja les agradezco muchísimo la libertad que me dieron para hacer mi propio camino de militancia y hacer política con mis propias manos”, dice ahora.
En ese camino, Ciudad Futura generó una expectativa que excede los límites de la bota santafesina. “Me entusiasma mucho cómo las compañeras de distintos lugares, ya no solo de Santa Fe sino también de Argentina, que ven en esta candidatura la posibilidad de incorporar dentro de una campaña todas nuestras luchas”, concluye Tepp.