Liliana Maltz presenta en Rosario su nuevo libro, donde propone pensar la Educación Sexual Integral desde la ternura, el cuidado y la construcción de redes. Habrá presentación y un taller abierto a la comunidad. En Conversaciones con la ESI, Liliana Maltz comparte propuestas y experiencias innovadoras que fortalecen los lazos entre docentes y familias, al mismo tiempo que brindan resguardo a quienes se ven expuestxs a acusaciones injustas. A través de cartas, diálogos, anécdotas y reflexiones, la autora abre un camino para transformar los desencuentros en entramados de ternura en todos los niveles educativos.
La presentación del libro será hoy, a las 18:30, en el Salón de Actos de la Facultad de Humanidades y Artes (Entre Ríos 758, Rosario). El evento contará con la participación de Ximena Frois y Romina Lusso, integrantes del Equipo ESI de Santa Fe y del Movimiento Federal XmásESI. La actividad es gratuita, con inscripción previa a través del formulario bit.ly/esiconversaciones
Además, mañana, de 9:30 a 12:30, en la misma facultad, se realizará el taller “¿Cómo convivir en las escuelas? Cuando armar lazos deviene una tarea urgente para la ESI”. La inscripción está a cargo de Nadina Muñoz (0341-153259874 – [email protected]) y el arancel para julio/agosto es de $25.000.
–¿Por qué hablar de ternura en relación a la ESI?
-Pienso que ambas tienen una estrecha relación. La ESI nos presta una manera de mirar la vida y los vínculos en la que se pone en valor la hospitalidad y, te diría, también nuestra humanidad en un contexto que nos va deshumanizando. Creo que esto se liga mucho a la ternura.
Ambas son una ética y una política de cuidado. En mis tres libros menciono esta relación: ESI, una oportunidad para la ternura, Vaivenes de la ternura y en Conversaciones con la ESI. En éste último planteo que las dos tienen como bandera la igualdad de oportunidades y el respeto por la dignidad de todas las personas. Se preocupan y ocupan por promover la equidad de género, la inclusión de las disidencias y de todas las poblaciones marginadas y vulneradas. Y, especialmente, son imprescindibles para defender nuestros derechos.
Entiendo a las dos como herramientas fundamentales para pelear contra toda violencia, discriminación y exclusión, y bregar por una sociedad más justa y solidaria, en la que el cuidado y el respeto por la otredad sean valores centrales en la construcción de políticas públicas que hoy escasean. Y especialmente las valoro porque son claves en las escuelas para crear comunidades en las que podamos vivir juntxs desde un lugar de cuidado colectivo y no en una guerra de todxs contra todxs.
–¿Cuál fue el disparador que te llevó a escribir este libro?
-En mi recorrida por las escuelas y en el acompañamiento a docentes de diferentes niveles para avanzar en la implementación de la ESI, fui recogiendo la preocupación y angustia presentes en la tarea cotidiana. Estos afectos venían ligados a las dificultades para convivir: vivir con otrxs diferentes de unx. A esto se suma el miedo a las familias y a las denuncias.
Me preocupaba ver que, frente a tanto desconcierto, la educación emocional se ofrecía como una solución mágica, muy tentadora para “comprar”. El discurso del odio, la discriminación, el impacto de las redes y la validación de la crueldad que emana desde el poder afectan la convivencia y debilitan los lazos.
Las escuelas pueden ser refugios, pero no son islas. En este contexto, si bien la ESI no es una varita mágica, es la mejor herramienta con la que contamos para pensar cómo vivir juntxs: entre pares, con las familias, entre colegas. La entiendo como una contra-pedagogía de la crueldad, parafraseando a Rita Segato.
Como abordo temas complejos y difíciles, se me ocurrió hacerlo en un formato distinto: cartas y conversaciones con la ESI. Fue casi un juego para mí y confieso que disfruté mucho de la escritura. Ojalá lxs lectorxs puedan escribir también sus propias cartas y conversaciones, que les sirva como recurso. Es una manera de mostrar a la ESI humana, ambivalente y empática, y no solo como la letra de una ley.
–¿Cuáles son los entramados a los que te referís y por qué son importantes en relación a la ESI?
-Por todo lo que te comentaba antes, es imposible hoy sostener la tarea de cuidar y avanzar en la implementación de la ESI en soledad. El armado de redes, el entramarnos con otrxs, deviene urgente y vital. Tanto al interior de las instituciones –entre colegas, con las familias, entre pares– como con otras instituciones: defensorías, centros de salud, sindicatos, espacios comunitarios, universidades. Todas ellas también velan por defender los derechos que hoy se atacan.
“Entramarnos en rodas alrededor de la ESI”, me gusta este trabalenguas y lo representé ilustrando la tapa del libro. Creo que el armado de estas tramas hoy es una de nuestras tareas centrales.