Cada temporada de The Morning Show (estreno el próximo miércoles por Apple TV+) sirve de reinicio para la señal UBN. En esta ocasión, las barras de ajuste multicolores ahora toman un color entre el amarillismo y la nota roja. Antes fue el movimiento “Mee Too” y la cultura de la cancelación, luego vino la pandemia y las fusiones empresariales. ¿Qué se trae ahora la ficción que juega a la carambola entre Poder que mata (Sidney Lumet; 1976) y los novelones de Shonda Rhimes? La redacción encabezada por Alex Levy (Jennifer Aniston) debe lidiar con encubrimientos corporativos y la naturaleza esquiva de la verdad en un Estados Unidos polarizado. Eso y transmitir noticias “sexys”, a decir de Celine Dumont (Marion Cotillard), una de las nuevas damas fuertes del canal.
La tensión entre lo profesional, lo íntimo, los rumores y lo muy público se mantiene como el fuerte de este arco compuesto por diez episodios. El arco de personajes y dilemas es amplio, pero quien se come la pantalla es Corey Ellison (Billy Crudrup), el indescifrable ejecutivo que sabe como atravesar temporales. Paul Marks (Jon Hamm) y Bradley Jackson (Reese Witherspoon) también aportan lo suyo. La frutilla de este Rogel mediático es Jeremy Irons, quien encarna al padre de la protagonista. “Tratamos de construir una relación verosímil. Y cuando trabajás con buenos actores, crear esa relación es muy fácil e interesante”, dice el británico. ¿Quién es Martin Levy? “Alguien que se ve como un buen hombre que debe reparar su relación con su hija. Necesitamos tener a nuestra familia de nuestro lado en momentos especiales. Mi personaje estuvo ausente y ahora reaparece, lo atractivo es que en realidad es Martin el que necesita ponerse en contacto con su hija. Es un viaje interesante el que los dos tienen que realizar como padre e hija”, apunta Irons.