A casi 25 años de la gran crisis orgánica que vivió la Argentina, el país parece estar camino nuevamente hacia el abismo. Si las consecuencias para el pueblo no fueran terribles, podríamos pensar en el guión de una serie tan apasionante como trágica, con personajes histriónicos que rozan el absurdo y una trama incierta que todos parecen adivinar.

La compleja situación que ofrece la economía y la poderrota electoral del oficialismo