En la imputación cruzada de manifestantes y uniformados que tramita en la justicia federal porteña por la represión del 18 de diciembre en Congreso, ayer quedó detenido Dante Barisone, el oficial del Grupo de Operaciones Motorizadas de la Policía Federal que le pasó con su moto por encima a Alejandro “Pipi” Rosado, un joven cartonero de 19 años. En su perfil de Facebook, Barisone se muestra orgulloso de los operativos represivos y se burla de los reclamos de justicia por Santiago Maldonado. En tanto, uno de los militantes del Partido Obrero, Lucas Sauret, fue liberado porque demostró que no estuvo en la calle esa jornada, pero su compañero César Arakaki no logró ser excarcelado y quedó imputado de lesiones contra un policía, por una foto en la cual aparece con dos palos en la mano cerca del cuerpo de un uniformado que está en el piso. 

“Niegan la libertad a una persona que estuvo a derecho todo el tiempo, es una escalada política, el juez Torres sigue los designios del gobierno y acá se acabó la independencia de poderes, el objetivo es ajusticiar a los partidos de izquierda, que nuestro compañero pase el año nuevo preso e ir por la ilegalidad de toda la oposición, porque    dejamos al desnudo el robo que fue la reforma provisional”, dijo a PáginaI12 Claudia Ferrero, abogada de César Arakaki. 

Torres dividió la causa en legajos donde investiga situaciones contrapuestas: por un lado el accionar represivo de las fuerzas policiales, que en conjunto causaron la pérdida de visión a cuatro manifestantes, y por otro las lesiones que sufrieron los uniformados por la respuesta de los reprimidos, que protestaban ese día contra los cambios en la actualización de las jubilaciones.

A pesar de que Sauret presentó como testigos a su jefe y a su coordinadora, que dieron cuenta de que estuvo trabajando, el magistrado no lo sobreseyó sino que le dictó la falta de mérito. Al menos, el militante del PO salió de Tribunales caminando. 

Menos suerte tuvo Arakaki, quien al finalizar la jornada fue trasladado al penal de Marcos Paz porque el juez le dictó la prisión preventiva por lesiones agravadas que sufrió un policía que tuvo fractura de cráneo y perdió la audición. “De todas las fotos no se lo ve en ninguna pegando, está haciendo malabares con dos palos, que no son armas de filo sino palitos cortos para poner las estacas de los carteles rectangulares que usamos en las marchas, pero volvemos a la calificación objetiva para denegar la libertad, lo cual es contrario a toda la jurisprudencia, los condenados por la tragedia Once siguen en libertad”, se quejó Ferrero. La abogada destacó que el militante se presentó en el juzgado el 20 de diciembre, le dijeron que no tenían nada en su contra, y cuando trascendió que habían solicitado su captura volvió a ponerse a disposición de la justicia, lo cual descarta la presunción de peligro de fuga. Ferrero agregó que “Arakaki es de River pero no pisa una cancha desde 2006, cuando comenzó a militar, le destruyeron su carrera de actor, usaron sus fotos de Facebook incluso para inculpar a su compañero Sauret, porque militan juntos en el local de Caballito”.

El PO dijo, además, que “la liberación no eximió a Sauret de soportar, en la noche en que permaneció detenido, intimidaciones verbales por parte de personal policial, y en el caso de Arakaki, el juez Torres no ha asegurado que su detención tenga lugar en condiciones seguras y adecuadas para quien es detenido por razones políticas. Ya mientras estaba detenido en la unidad 29 de Comodoro Py, soportó amenazas y agresiones verbales por parte de presos comunes. Ni qué decir que una detención en un pabellón de esas características en Marcos Paz pone en peligro su vida y su integridad física”. Y agregó que “quieren intimidar a toda la población trabajadora que se pronunció y luchó contra la reforma previsional”.

En tanto, Barisone quedó imputado por lesiones, agravadas por su condición de miembro de una fuerza policial. Su Facebook permite ver su pensamiento. Por ejemplo, en octubre posteó un video de Marcos Peña en el Congreso, en el que el Jefe de Gabinete defendía la lucha contra los narcos con la frase “Estoy orgulloso de las fuerzas de seguridad que están liderando el combate al narcotráfico que ustedes no realizaron”. El policía acompañó la publicación con la frase “Ahí tenés garantista de mierda”.