El lugar común asocia los festivales de cine con las alfombras rojas. Lo particular del que se realiza en la localidad misionera de Oberá desde hace 22 años es que nunca fue necesario desplegar nada, porque los altos niveles de óxido de hierro de la tierra aportan la tonalidad colorada característica del suelo de la provincia de las Cataratas del Iguazú y las ruinas de San Ignacio. Es así que entre este lunes 6 y el próximo sábado bastará con mirar los pies mientras se camina por las calles de esta ciudad de sesenta mil habitantes, ubicada a casi 100 kilómetros al noreste de Posadas, para sentirse parte de la 22º edición del Festival Oberá en cortos. El evento presentará más de cincuenta películas –con amplia mayoría de cortos y un puñado de largometrajes– del noreste de la Argentina, el sur de Brasil y Paraguay y reunirá a buena parte de la comunidad audiovisual de la región.
El carácter de punto de encuentro es validado por una voluminosa oferta de actividades paralelas que incluyen talleres, conversatorios y charlas sobre temas relacionados con las inquietudes del sector audiovisual de una provincia que se ha convertido en referente en materia de producción. No por nada tiene, desde 2014, una Ley de Promoción Audiovisual que apoya, promueve y fomenta la creación de obras, así como también su difusión y conservación como patrimonio sociocultural.
La programación del Oberá en cortos se caracteriza por incluir secciones competitivas cada dos años (en los otros sólo hay muestras). Así ocurrirá en la edición que levantará oficialmente el telón con la proyección en el cine teatro Oberá del doble programa integrado por el cortometraje ganador del Certamen Entre Fronteras en 2023 Amei te ver, de Ricardo García, y el estreno del largometraje Y la intensa lluvia, del realizador y director de fotografía misionero Guillermo Rovira, centrado en la historia de dos amigas que pasan mucho tiempo sin verse y se reencuentran durante un viaje en el que irán reparando un vínculo que estaba roto.
Si hasta 2023 las competencias eran tres (cortometrajes universitarios, una regional y otra internacional), ahora habrá cuatro, ya que se suma una dedicada a largometrajes. Aquí estará El príncipe de Nanawa, en el que la realizadora correntina Clarisa Navas registra durante una década el crecimiento, los deseos y las resistencias cotidianas de un niño que crece en un pequeño pueblo en la frontera con Paraguay. También, la coproducción con Paraguay y Chile Una sola primavera, de Joaquín Pedretti, que narra la historia de una joven que busca su lugar entre amor, la lucha política y la clandestinidad en medio de la guerra civil paraguaya de mediados del siglo pasado.
Desde Brasil llegará Cine Globo: una vida de cine, un documental de Christian Jafas y Carlos Roberto Grün sobre el Cine Teatro Globo de Três Passos y el valor comunitario de mantener una sala independiente, mientras que Paraguay aportará Kuarahy Ára – El tiempo del sol, de Hugo Gamarra Etcheverry, una investigación cinematográfica que conecta las imágenes filmadas en 1968 por Dominique Dubosc con las memorias de campesinos y su legado cultural. La Argentina también estará representada por Vinchuca, de Luis Zorraquín, una ficción sobre un adolescente envuelto en el contrabando en la frontera y sus tensiones con las fuerzas de seguridad.
Tal como lo indica su nombre, Oberá en cortos presta especial atención a las producciones de menos de 30 minutos. De las tres secciones competitivas dedicadas a ellas, la más relevante es la Internacional, integrada por una decena de títulos. Como por ejemplo La identidad que hemos construido, en el que Tatiana Escárate explora la fortaleza de la memoria, la resistencia y el amor por la vida de tres mujeres trans, o Exento, de Otto Morales, sobre los lugares públicos de Cuba donde la comunidad gay se reúne a escondidas. Por su parte, en Baile da Curva el director Bruno Autran registra los preparativos de un grupo de estudiantes de secundaria que desarrollan una obra de teatro que transcurre durante la dictadura brasileña, mientras que Bijupirá, de Eduardo Boccaletti, acompaña a un chico que vive con un pescador en el mar y comienza a cuestionar su propia vida.
Eduardo Álvarez es el responsable de Asterion, acerca de un anciano ermitaño que durante una caminata por la playa descubre algo siniestro sobre su persona, y Hernán Velásquez Villa, el de No te despiertes, que sigue a un padre y una hija en el que la inocencia de ella y la imaginación de él serán claves para subsistir. Las pardas, de Simone Sojo, sigue a un grupo de amigas travestis que se cuelan en una piscina municipal para sobrellevar el calor, sin saber que el peligro acechará en los alrededores. Sobre peligros versa también La marcha, de Juan Luis Muñoz, centrado en un grupo de prisioneros de la dictadura chilena que son obligados a marchar para ser fusilados y sepultados en una fosa clandestina.
La competencia "Entre fronteras", por su parte, también presentará diez títulos que en común tienen haber sido realizados en Paraguay, el sur de Brasil o el noreste de la Argentina. Como Bienvenido, de Miguel Usandivaras y Martín Jalfen, protagonizada por un chico de quince años de una familia humilde de Misiones que descubre que el universo del fútbol es un mundo lleno de prejuicios. Otra que jugará de local es Araucario. Una promesa de amor para vencer al horror, en el que Sebastián Andrés Korol narra la historia de dos hermanos militantes agrarios que, en plena época de terrorismo de Estado, hacen una promesa que deberán cumplir a como dé lugar. Este apartado se completa con, entre otras, La luna despojada, de Roly Ruiz; la paraguaya Mamá Michĩ, de Emilio Penayo Macchi, Giovanna Herrnsdorf y Bruno Cattebeke; la brasileña El semáforo amarillo, de Guilherme Carravetta De Carli; La nena, de Josefina Lens; Gallina, de Ana Arza; y Logos, de Britney Federline.
El menú se completa con los trabajos del certamen competitivo universitario, una muestra sobre cine comunitario, un panorama internacional no competitivo, una proyección especial de Los inundados, de Fernando Birri, y una función de clausura a cargo del largometraje El creador, pautada para el sábado 11 por la tarde, cuando las zapatillas ya estén más rojas que cualquier alfombra.