Un hombre de 36 años murió luego de quedar en medio de un tiroteo entre policías de la Ciudad y un grupo de ladrones, en Villa Urquiza. El tiroteo se desarrolló cuando Mauro Díaz manejaba de regreso a su casa y dos delincuentes –que eran perseguidos por esquivar un control de tránsito– intentaron robar su auto. Si bien aún no se sabe quién disparó a Díaz, el fiscal de la causa, Carlos Vasser, dispuso el secuestro de las armas de los uniformados. Los vecinos denunciaron una “zona liberada” en el barrio.

Todo comenzó el domingo a la noche. Un policía del control vehicular de General Paz y Constituyentes le hizo señas a un Citroën C4 gris, con tres personas a bordo, para que se detuviera al costado de la calle. El conductor del auto, en cambio, hizo todo lo contrario a la orden policial: aceleró, eludió al control y escapó a toda marcha por la calle Núñez, en Villa Urquiza. Ante esa acción, el patrullero del destacamento –a cargo de la comisaría N° 47 de la Ciudad– comenzó a perseguirlos. De acuerdo con la versión policial, durante la persecución “los efectivos chequearon la patente del Citroën y constataron que se trataba un auto robado”. 

Los delincuentes siguieron su marcha por Núñez hasta llegar al cruce con la calle Zado. En ese momento, el auto de Díaz (un Fiat Uno) se interpuso en el camino: Díaz, de 36 años, regresaba a su casa a muy baja velocidad. Dos de los tres ladrones se bajaron del Citroën y robaron el auto de la víctima. En ese preciso momento, el patrullero de la Policía de la Ciudad llegó a la intersección. Se inició un tiroteo y una bala impactó en el cuerpo de Díaz. Los dos autos robados siguieron con el escape y el patrullero tras ellos.

“Estamos todos destrozados, no lo podemos creer, era un chico maravilloso, siempre atento con sus tres hijos y su esposa”, dijo Claudia, pareja del padre de Díaz.

A bordo del auto de la víctima y del Citroën C4, los tres delincuentes escaparon por la Panamericana. A las 5 de la madrugada, David Asselborn apareció en la puerta del hospital Central de San Isidro con una bala en el pecho y sin ningún acompañante. El hombre murió a los pocos minutos de ser atendido. Los investigadores indicaron que se trataría de uno de los delincuentes que había participado del tiroteo de Villa Urquiza y agregaron que esa noche “su pareja se presentó en la comisaría de San Martín para denunciar que no había regresado a su casa”.

Por su parte, el fiscal a cargo de la UFI N°21, Carlos Vasser, dispuso el secuestro de las armas utilizadas por los uniformados para determinar si de alguna de ellas partió el disparo que mató a Díaz e indicó que Prefectura Naval sea la encarga de realizar el peritaje balístico. Además, la Policía de la Ciudad inició un sumario interno, según contó un vocero de esa fuerza de seguridad a PáginaI12.

Los vecinos de Villa Urquiza aseguraron que la zona donde murió Díaz hace meses que funciona como una zona liberada.