"Ellos saben que están mintiendo. Por eso mi tranquilidad. La tranquilidad de los inocentes. De aquellos que no cometieron ningún crimen. ¿Temen que vuelva? Ellos tienen miedo por las buenas cosas que hicimos", arengó el líder del PT Luis Inacio Lula Da Silva ante un cientos de miles de manifestantes que colmaron la denominada "Esquina Democrática" en el centro de Porto Alegre a la espera de que un tribunal de segunda instancia revise la condena que el juez Sergio Moro, a cargo de la megacausa Lava Jato, le impuso al virtual candidato presidencial con mayor intención de votos.
"Yo no vine a hablar de mí, viene a hablar de Brasil, vine a hablar de la unidad latinoamericana. Vine a hablar de un país que probó que era posible construir una sociedad diferente, que podía crear empleos formales, que impulso aumento de salarios y aumento de la productividad", les dijo Lula a los manifestantes de a pie, de partidos políticos aliados al PT y de organizaciones sociales, como el relevante Movimiento de Trabajadores Sin Tierra, que se movilizaron bajo la consigna: "Elecciones sin Lula son fraude".
Agradecido por la inmensa movilización de respaldo, que rodeaba el palco donde se ubicaron artistas y dirigentes políticos y sociales, Lula aseguró que necesita que "el pueblo participe para recuperar el país" y aseguró que "la izquierda se reunirá no alrededor de un candidato sino en torno a un proyecto". En ese sentido, el líder del PT recordó que el proyecto político que encabezaron él y Dilma Rousseff fue el de "una Latinoamerica unida" y recordó el acompañamiento de Néstor y Cristina Kirchner, Hugo Chávez, Pepe Mujica, Rafael Correa y Evo Morales.
Lula criticó con dureza a la derecha brasileña que dio el golpe parlamentario contra Dilma en mayo de 2016 y relacionó los intereses de esa clase dirigente con los intereses de Estados Unidos, porque "nunca aceptaron que Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile, Ecuador, tuvieran soberanía pudieron pensar políticas de liberación sin depender de ellos".
El histórico dirigente gremial recordó que la derecha brasileña "expulsó a Dilma sin respetar 54 millones de votos" y resumió la gestión del golpista Michel Temer: "Estoy viendo que venden un crecimiento de exportación, cuando en realidad la única explicación es la caída de las importaciones. Venden estabilidad, cuando el gobierno ni siquiera tiene credibilidad".
"Ellos inventaron una enfermedad llamada PT que provocaba el ascenso de los más pobres", lamentó Lula y advirtió que "la enfermedad que ellos intentaron sacar está siendo sustituida por una peor, que sacó la esperanza de nuestro pueblo".
"Este país era respetado, era protagonista internacional", resaltó el líder del PT y aseguró: "Este país volverá. Pueden estar seguros", para luego anunciar que volverá a realizar una gran caravana por todo el país como, un clásico de la campañas de Lula. De esa manera, el hombre con mayor intención de votos para las generales de octubre se mostró calmado en la previa del fallo de segunda instancia que podría condicionar su postulación.
"Ellos saben que están mintiendo. Por eso mi tranquilidad. La tranquilidad de los inocentes. De aquellos que no cometieron ningún crimen. ¿Temen que vuelva? Ellos tienen miedo por las buenas cosas que hicimos", aseguró.
A la espera de la palabra de Lula, la expresidenta Dilma Rousseff había tomada la palabra para celebrar la masiva movilización. "Estamos aquí no por cada uno de nosotros sino por Brasil. Este Brasil precisa de un hombre, también va a precisar de mujeres, siempre, pero ahora precisa de Inacio Lula Da Silva para tener un camino de esperanza", afirmó la referente del Partido de los Trabajadores.
Dilma denunció el "golpe parlamentario" que la destituyó del poder a principios de 2017 y calificó de "cómplice" al Poder Judicial, que mañana tendrá en sus manos la inhabilitación de Lula como candidato, en caso de confirmar la cuestionada sentencia de 9 años de prisión dictada por el juez Moro.
"El presidente está siendo juzgado sin ningún fundamento. ¿Por qué la persecución y la injusticia abierta en este país? Porque ellos temen una derrota política inmensa, porque mostraron su verdadero rostro: gente que no se sensibiliza por el pueblo", aseguró Dilma desde el palco colmado por dirigentes políticos y sociales y artistas que respaldan la candidatura de Lula.
"Elllos no tienen quién pueda disputar con Lula. No pueden ganar la elección con el proyecto de quitar derechos a nuestro pueblo", afirmó Dilma e insistió: "No tenemos un plan B, porque nuestro camino hacia el 2018 tiene ese nombre: Luis Inacio Lula Da Silva".