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Un cortocircuito provocó un incendio en la Torre Eiffel, el monumento más visitado de París, y aunque no hubo heridos, la policía y los bomberos tuvieron que rescatar a unas 3000 personas, algunas de las cuales estaban en el último piso del edificio, que es la postal más conocida de Francia en todo el mundo. La policía aseguró que se trató de “un hecho accidental”, motivado aparentemente por una falla en el sistema eléctrico. El ayuntamiento de París, propietario del monumento, precisó que el fuego se produjo en un ascensor cuando llegaba al tercer piso, es decir, en la cima de la Torre Eiffel. Como consecuencia del siniestro, la torre fue cerrada ayer al público, aunque se cree que volverá a abrir hoy.
Las imágenes de la torre en llamas fueron difundidas en directo por la cadena de televisión LCI. El fuego en el último piso hizo temer por las repetidoras de radio y TV instaladas allí, pero el presidente de la nueva sociedad de la Torre Eiffel, Jean-Bernard Bros, dijo que sólo fue un “pequeño incendio” que no causó “ninguna víctima”. El alcalde de París, el socialista Bertrand Delanoe, se hizo presente al pie de la torre para seguir la tarea de los bomberos.
El cortocircuito se habría producido en una sala de cables del tercer piso y el fuego posterior se focalizó en un ascensor. Las autoridades aseguraron que las llamas no afectaron las estructuras ni el sistema de iluminación. De los tres mil turistas evacuados, 200 estaban en el tercer piso. El rescate “se llevó a cabo en muy buenas condiciones” porque el equipo de seguridad tiene experiencia dada la gran cantidad de “falsas alertas de bomba en serie” que muchas veces obligaron a desalojar el edificio, explicó Jean-Bernard Bros.
En París, durante el verano, la torre puede ser visitada hasta la una de la madrugada. El incendio comenzó cerca de las 20, hora de Francia, a partir del cortocircuito “en el cablerío de una sala técnica de 40 metros cuadrados en el tercer piso”, donde funcionan las repetidoras de Teledifusión de Francia. Al lugar no tiene acceso el público, de manera que el problema más grave surgió cuando se prendió fuego el ascensor. El siniestro fue dominado cortando la energía eléctrica y utilizando una pequeña bomba de agua. Conocida en el extranjero como el símbolo de Francia, la Torre Eiffel, que fue inaugurada en 1889, tiene una altura de 324 metros y recibe unos 6 millones de visitantes cada año.