espectaculos

Lunes, 31 de diciembre de 2007

TEATRO › VUELVE “ART”, A DIEZ AÑOS DE SU ESTRENO

“El centro no es el arte moderno sino las emociones”

Los actores Ricardo Darín, Germán Palacios y José Luis Mazza explican por qué la obra de Yasmina Reza, que regresa este verano a la cartelera marplatense, se mantiene vigente a través del tiempo con una profunda reflexión sobre la amistad.

 Por Hilda Cabrera

Un cuadro de tela blanca es catarsis de pintor o broma, original metáfora o rebeldía sin imaginación, suma de todos los colores o excusa para radiografiar una relación de amigos que se supone firme. Algo de esto último aparece en ART, obra de la novelista y dramaturga francesa Yasmina Reza que se estrenó en Buenos Aires en 1997, tres años más tarde que en París. Entonces actuaban Oscar Martínez, Germán Palacios y Ricardo Darín. Pero un día de esos años de éxitos y giras se produjo una emergencia, y hubo que sustituir a Martínez, justamente cuando el elenco cumplía funciones en España. “Evaluamos distintas alternativas hasta que Pepe (el actor José Luis Mazza) se hizo cargo del personaje de Oscar –cuenta Darín, en diálogo con Página/12, junto a Palacios y Ma-zza–. Ensayamos contra reloj. Pepe debía responder en dos días a las exigencias de lo que es hacer un toro en teatro (cubrir el papel de otro en muy poco tiempo). Al tercer día se acomodó y dejó de ser alguien que nos sacaba las papas del fuego para convertirse realmente en personaje. A partir de ese momento, el trabajo se hizo más relajado y calmo.”

Esa confianza que acompañó al grupo en aquella gira, y en las sucesivas presentaciones en provincias, se advierte en el reestreno en Mar del Plata. La obra, premiada y traducida a treinta y cinco idiomas, ocupa hoy el escenario del reciclado Teatro América, propiedad de Carlos Rottemberg. El talento de Mazza para “seguir adelante sin asustarse” no es un descubrimiento reciente. El actor conoce la obra hasta en sus detalles mínimos, pues se ha ocupado de la producción artística desde el debut. ART refleja un enfrentamiento, un duelo de emociones cuyo disparador es un cuadro de tela blanca atravesado por tres líneas (en otra variación del blanco), por el cual Sergio (uno de los tres amigos de esta historia) pagó una fuerte suma de dinero.

–¿Qué les dice hoy ART?

Ricardo Darín: –Después de casi diez años del debut, y de un intervalo de año y medio, ART nos sigue sorprendiendo. El conflicto parece sencillo, pero solamente parece. Mientras estuvimos con Oscar, y después con Mazza, necesitábamos reunirnos por lo menos veinte minutos al terminar la función para intercambiar opiniones. No podíamos despegarnos.

–¿Quizá porque coloca a la amistad en estado de crisis?

R.D.: –A la amistad y la tolerancia.

Germán Palacios: –Descubríamos detalles, sutilezas que en nosotros se convertían en una obsesión de trabajo.

–Según expresiones de Yasmina Reza, esta obra partió de una burla suya a un amigo que había comprado a un precio muy alto un cuadro de tela blanca. ¿Encuentran a menudo motivos de burla entre amigos?

José Luis Mazza: –Todo el tiempo. Critico y me critican, pero eso no deshizo amistades.

R.D. : –Las crueldades son a veces conscientes, y otras no. Tampoco es necesario pronunciar una palabra: bastan una mirada o una pausa, porque en algunas circunstancias el silencio es abandono. Me creo bastante mala persona en estas cosas, y me amparo en el humor para decir algo grave. Es una cobardía, lo admito.

J.L.M. : –En ART depende de las situaciones: en algunos diálogos la palabra es un arma.

–¿A partir de esta obra se preguntan más sobre qué es arte?

R.D. : –Creo que más que preguntarnos, actuamos sobre la propuesta a discutir. Un hallazgo de Reza es tomar el arte moderno como epicentro, justamente porque éste es un arte sobre el cual difícilmente hay acuerdo.

Uno se para frente a la Gioconda, y más allá de la idea que tenga sobre esta pintura –y el estado emocional que le provoque–, sabe que en ese cuadro hay algo indiscutible. No es así con el arte moderno. Lo interesante en ART es también el nivel de discusión de los amigos. Ellos no caen en los lugares comunes a los que estamos acostumbrados los varones. Utilizan términos que todos conocemos y pocos usamos; precisos y nada chabacanos.

–¿Cómo fue la experiencia en España? La obra había sido estrenada en 1998 por Joseph María Flotats...

R.D. : –Cuando la presentamos en Madrid, Barcelona y Valencia, Flotats ya la había llevado por toda España.

–Reza habló de enojo...

R.D. : –Tenemos entendido que el elenco le dio otro enfoque.

G.P. : –Los actores estaban vestidos de blanco, por ejemplo.

R.D. : –Eso nos llamó la atención. En nuestra puesta, las mayores exigencias están en la escenografía y la iluminación. Estas contienen y protegen a la obra. Preferimos un montaje ascético donde las interpretaciones estén por delante de cualquier otro elemento.

–¿Cuál sería el significado del blanco en el vestuario?

G.P. : –No lo sé. Me parece redundante: una debilidad dramática.

R.D. : –Es difícil opinar sobre lo que no vimos pero tenemos demasiada información. Nos han contado hasta el hartazgo sobre esa puesta.

G.P. : –Alguno se enojó, pero eso no es relevante. Tuvimos público y los actores vinieron a vernos. Lo que hacemos es distinto a lo de ellos.

R.D. : –Para nosotros, ese detalle del blanco es incomprensible. El personaje de Germán y el mío tal vez puedan pasar vestidos de blanco, pero el de Pepe no. Además, lo que está en discusión realmente no es el cuadro blanco.

G.P. : –En definitiva, el centro no es el arte moderno sino las emociones.

–¿La intención es evitar el enfoque intelectual?

R.D. : –Eso depende de cada situación, pero es cierto que no trabajamos sobre el aspecto intelectual de la discusión, sobre todo la que enfrenta a Marcos y Sergio, porque Iván queda en medio de ellos, y es el más atemorizado.

J.L.M. : –Nuestra versión es visceral.

–¿Habrá una película ART?

R.D. : –La idea de filmar surgió de las varias idas y vueltas que hicimos a la oficina de Reza y su agente literaria, en París. Opinamos que era mejor no tocar la obra y hacer, en cambio, algo periférico: mostrar a una compañía queriendo montar una pieza como ART.

J.L.M. : –Una compañía que actúa la obra de a ratos, mientras se suceden otras historias.

R.D. : –Como a todo autor, eso de no tocar la obra le gustó a Reza. Ella nos vio actuar en España y se mostró conforme; así que acordamos retomar la charla.

Compartir: 

Twitter

Ricardo Darín, Germán Palacios y José Luis Mazza descansan en el texto de Reza.
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.