9-Piedra Lunar

Wagner Taján Dúo. Folklore Buenos Aires

El dúo platense lanza su segundo disco, y se consolida como una voz diferenciada en el amplio y fructífero abanico de nuevos grupos folklóricos. Piano, guitarra y voces afinadas sobre un buen repertorio son las primeras claves descriptivas, a las que habría que sumar arreglos que re-iluminan, sin sacarlos de su eje, temas tradicionales como la cueca “La plumita”, de Arsenio Aguirre. Se destacan también los temas firmados por Octavio Taján, el candombe “Adiós a la rama”, de Rubén Rada, o la bella “Diamante”, de Jorge Fandermole, con el autor como invitado. K. M.

María Teresa Corral. Acqua Records

María Teresa Corral es conocida por ser fundadora y referente del Momusi, movimiento central en el desarrollo de la música para chicos en este país. “Sus canciones para grandes”, son anunciadas éstas, muchas de su autoría, junto a recopilaciones del cancionero tradicional español agrupadas como Las Catalinas y Las Delgaditas. Son grabaciones en vivo de un ciclo que dio a principios de los ’90, con Esteban Morgado en guitarra. Permanecen frescas con la marca de su mirada poética lúdica, esa que descubre lo importante, lo injusto o lo ridículo del mundo, a partir de la más simple observación. K. M.

Gorillaz. Parlophone / EMI

Damon Albarn sigue innovando. Y en ese ejercicio, remarca su firma en la lista de los artistas más inquietos y trascendentes de la música moderna. Aunque es cierto que este disco, compuesto casi en su totalidad con un iPad durante la última gira de Gorillaz, es disperso y no tiene gran argumento o fundamento, su valor es seguir intentando modos de componer, tras revisar al pop y al rock con Blur y al hip hop, la electrónica y la world music con Gorillaz. The Fall será no mucho más que 43 minutos de un tipo jugueteando con su nuevo chiche tecno, pero también es vanguardia. L. P.

Satan Dealers. Scatter Records

Diez años de garaje rock y protopunk rabiosos quedan sintetizados en esta grabación de fines de 2009: más vale correrse de su camino porque Satan Dealers no acostumbra tomar prisioneros... La gloriosa herencia de los MC5 y los Stooges se nota en cada acorde filoso y en la actitud de Adrián Outeda, que canta como si necesitara escupirle al mundo las letras de sus temas (y de covers como “Moonage Daydream”, de David Bowie, y el hit ochentoso “Betty Davis Eyes”). Para ser un disco en vivo, le falta algo de calor del público, pero a la música le sobra furia y salvajismo. R. C.