LIBROS Y PUBLICACIONES
Libros y publicaciones
LOS DRAGONES DEL EDEN
Carl Sagan
Ed. Crítica, 259 págs.
Para un lector superficial, ingresar en la obra de divulgación científica del astrónomo Carl Sagan (1934-1996) es adentrarse en un mundo prolífico y ajeno plagado de citas a la cabeza de cada capítulo. En cierto sentido, es verdad: Sagan logró como ninguno inspirar al lector desde la primera línea con exquisitas y magistrales frases proferidas por los personajes más diversos y eclécticos. Las palabras de Shakespeare, William Blake, Aristóteles, John Milton o Joseph Conrad, entre muchos otros, se mezclan para resonar con fuerza en sus trabajos. Así también ocurre en su clásico de 1977 (aunque todas sus obras se consideren ahora clásicas) Los dragones del Edén: especulaciones sobre la evolución de la inteligencia humana, ahora publicado en una edición de bolsillo, es tal vez el más controversial de sus libros no tanto por lo que dice en él sino porque es el único libro en el que el creador de la serie televisiva Cosmos se explaya sobre algo en un principio totalmente ajeno para él: la biología humana.
De la mano-guía de Charles Darwin, Sagan se hunde en la (pre)historia más profunda del ser humano para comprender la naturaleza y evolución de su intelecto. Y sale airoso: no sólo comprime de una manera única lo acontecido en el universo desde el Big Bang hasta nuestros días en un solo año (un “año Sagan” –como se lo conoce desde entonces– donde el primer hombre aparece a las 22.30 del 31 de diciembre) sino que logra que el lector profano en la materia entienda de una vez por todas la variedad de homínidos y/o animales con apariencia antropoide que precedieron al Homo sapiens en su marcha por la Tierra (Homo erectus, Homo habilis, Australopithecus, hombre de Cromagnon y hombre de Neanderthal).
Como en La conexión cósmica, Sombras de antepasados olvidados, El cerebro de Broca, El mundo y sus demonios y Miles de millones, el astrónomo que enseñó a generaciones el significado de las palabras “galaxias”, “nebulosas” e “invierno nuclear” conmueve con sus anécdotas al tiempo que explica el funcionamiento locuaz del cerebro, un órgano esponjoso pero genial, que hace al ser humano tan especial y único.