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Sábado, 1 de junio de 2013

SOCIEDAD › LOS TESTIGOS DE MADERNA

Defensa cantada

Dos nuevos testigos declararon ayer en la causa por delitos de lesa humanidad en la ciudad de San Lorenzo. Amalia Dua Castella fue directora en la Municipalidad de esa ciudad desde la gestión del intendente democrático, Luis Vivas, quien accedió al gobierno en las elecciones del 11 de marzo de 1973 y fue depuesto el día del golpe militar. Dua Castella dijo recordar perfectamente el 24 de marzo de 1976 porque su novio --actual marido-- juró como abogado en los Tribunales Provinciales. La mujer continuó trabajando en el municipio muchos años después y en 1988 fue testigo de casamiento de Horacio Maderna, uno de los tres imputados del juicio oral y público por el secuestro del entonces secretario general del Sindicato Municipal de San Lorenzo, Manuel Casado, el 25 de marzo de 1976, y las torturas que sufrió durante su cautiverio. La mujer admitió que era amiga de Marta Flores, la esposa de Maderna, aunque luego dijo que ya no tenía ningún tipo de amistad con ellos. También subrayó que nunca tuvo militancia. "No estoy afiliada a ningún partido político. Vivas ni siquiera me exigió que me afiliara", afirmó.

Los imputados en este juicio son Rubén Cervera, que fue jefe del Batallón de Arsenales ubicado en Fray Luis Beltrán e intendente de facto de San Lorenzo; el capitán retirado Maderna, que fue su segundo en el Batallón y secretario de Gobierno municipal desde el 24 de marzo de 1976 y Pedro Rodríguez, que fue Director de Asuntos Jurídicos antes y después del golpe.

El Tribunal Oral Federal que preside Otmar Paulucci escuchó a otro testigo, Apolo Brock, un médico de San Lorenzo que, apenas se sentó, admitió que juega al tenis los sábados con Maderna. Es más, ante las preguntas del abogado querellante Gustavo Feldman, reconoció también que el imputado le hizo referencia a su participación como testigo en el juicio. Brock era médico inspector municipal en 1976 pero afirmó que "no iba nunca a la Municipalidad". Desconocía que Casado haya sido secuestrado y torturado, pero tampoco recordaba a otros desaparecidos de San Lorenzo, como Hugo Parente y Roberto Potongo Camuglia.

El viernes se realizarán las inspecciones judiciales en la Municipalidad de San Lorenzo, el Batallón de Arsenales y la Jefatura policial donde Casado estuvo secuestrado. El Tribunal dispuso que participen los abogados defensores pero no los imputados, que luego verán la inspección en video. La única declaración pendiente es la del ex jefe del Ejército Martín Balza, que ya testimonió en la causa, en su etapa de instrucción, y actualmente es embajador en Costa Rica. Resta definir si viajará a Rosario o se hará por videoconferencia.

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