Un año después, y tal como lo habían adelantado las autoridades de la usina Sorrento, la central termoeléctrica volvió a funcionar el fin de semana pasado y de esa manera se inyectaron nuevos 155 megavatios diarios a la red, que si bien está interconectada a nivel nacional, "favorece a la Empresa Provincial de la Energía (EPE) por la ubicación geográfica", señaló Osvaldo Collomb, vicepresidente de la firma. Esos 155 megavatios representan un 10 por ciento de los entre 1300 y 1600 megavatios de consumo de la provincia, cantidad que a su vez se cerca al 10 por ciento del total nacional (es decir que Sorrento produce cerca del uno por ciento de la energía que necesita el país).

Según aseguró el vocero de la usina en diálogo con Radio Dos, el jueves a la tarde se realizaron pruebas para la generación de energía y el sábado a la tarde se concretó la reactivación oficial de la central que estuvo paralizada más de un año. La inversión total osciló entre los nuevo y diez millones de pesos, según la propia empresa.

"La EPE va a estar más tranquila", agregó Collomb, y explicó que aunque los 155 megavatios netos que se inyectan a la red nacional por día (que al estar interconectado no quedan necesariamente en Santa Fe) "la ubicación geográfica que tiene la usina a la EPE le viene bien porque está muy cerca de los centros de consumo de Santa Fe".

En ese sentido, señaló que "no es lo mismo traer energía desde el Chocón o de Buenos Aires o Salta, porque de esta manera tiene un nodo más fuerte al estar más cerca; mejora la tensión y la potencia de la red". Esos 155 megavatios representan un 10 por ciento de los entre 1300 y 1600 megavatios de consumo de la provincia, cantidad que a su vez se cerca al 10 por ciento del total nacional (es decir que Sorrento produce cerca del uno por ciento de la energía que necesita el país).

Al ser consultado sobre las preocupaciones de algunos vecinos por posibles reacciones contaminantes de la vieja usina, Collomb respondió que Sorrento no utiliza el Fuel oil que viene de Venezuela "porque tiene un alto porcentaje de azufre" y que al ser una "fábrica de energía eléctrica" cumple "rigurosamente con los controles de los entes".

No obstante ello, aclaró: "Por ahí, cuando la combustión es mala, puede llegar a salir humo negro (de la chimenea de la usina) lo que no quiere decir que esté contaminado" el medio ambiente.